Estas son mis primeras líneas en Poblanerías y quiero agradecer a mi amigo Luis Enrique Sánchez Fernández por darme la confianza y permitirme plasmar mis ideas en uno de los portales más importantes en Puebla y aquí vamos…

Estamos a unas horas de celebrar las fiestas patrias y estoy segura que muchos nos estamos preguntando ¿Qué vamos a celebrar? Se supone que el objetivo de la celebración de las fiestas patrias es preservar el recuerdo del día en que se inició la independencia. Es importante que recordemos que la unidad ha sido ante todo una característica indispensable de los mexicanos y lo hemos hecho desde siempre, sobre todo en momentos de dificultad.

México es un país reconocido por todo el mundo, admirado por su cultura y hechos históricos, así también conocido por todos los conflictos a los que nos hemos enfrentado.

Desde hace algunas semanas ha estado en circulación un mensaje donde se pide a la población dejar solos a los gobernantes en las diferentes plazas públicas para la noche del grito de independencia en protesta contra la inseguridad.

Analizando bien la propuesta no es una mala idea si consideramos dar una lección a las autoridades, pero el problema empieza cuando a los ciudadanos se nos olvida que más allá de la inseguridad que hoy vivimos también existen otros problemas que de igual manera son importantes como lo es la pobreza, seguridad social, educación, entre muchos otros.

Mientras el Jefe de Estado, Felipe Calderón, está preocupado por posicionar a su delfín Ernesto Cordero en la elección interna de su partido para la candidatura por la presidencia de la República, miles de niños sufren de desnutrición; mientras el gabinete entero está pensando a quién apoyarán para que sea su próximo candidato, mucha gente se encuentra en pobreza extrema, no tienen acceso a la educación y lo que es peor, están cayendo en las redes del crimen organizado; entonces ¿Quién está gobernando?

Todo esto que acaban de leer, suena ya muy trillado, pero la única manera de lograr que los que llevan las riendas de este país sepan que no estamos conformes con lo que están haciendo es diciéndolo una y otra vez, hasta que se harten o comiencen a hacer su trabajo.

No podemos permitir que manchen fechas históricas y nuestro orgullo nacionalista con falsas cifras porque si hay algo que no se puede manipular es la percepción de la ciudadanía. A veces pareciera que a los partidos políticos, pero sobre todo a los gobernantes, se les olvida que los ciudadanos son los que tienen el poder del voto.

En este momento deberían estar ocupados en solucionar los problemas que tiene México y los que tendrá con el paquete económico presentado por Cordero, utilizado como un acto meramente mediático antes de irse para buscar lo que no encontrará. El aumento del 22.7% en gasto corriente, disminución en inversión para infraestructura y educación no es precisamente una acción responsable, sino el resultado de un trabajo hecho por y para beneficiar en términos económicos al gobierno federal y no a la ciudadanía.

Entonces regresamos a la pregunta inicial ¿Qué celebramos los mexicanos? Es cierto que hay muchas cosas mal, pero si ya nos quitaron casi todo, no podemos permitir que nos quiten el orgullo de ser mexicanos. Cada uno de nosotros desde nuestra trinchera hagamos lo que nos corresponde como ciudadanos, tal vez solo así enderezaremos el camino.