Una vez que Felipe Calderón deje la presidencia, recibirá una pensión vitalicia por la cantidad de 215 mil pesos mensuales, además, tendrá a su disposición 45 elementos del Ejército conformado por un general, cuatro jefes de tropa, ocho oficiales y 32 miembros de tropa; y 22 elementos de la Marina que serán dos almirantes, cuatro oficiales y 16 miembros de tropa; para su seguridad y la de su familia.
Con base en los dos reglamentos correspondientes al otorgamiento de pensiones y prestaciones a los ex presidentes, Calderón gozará de un aguinaldo anual de 43 mil pesos, un seguro de vida por 8 millones de pesos y un seguro de gastos médicos mayores para él y para su familia hasta por 390 mil 600 pesos.
Aparte de personal del Ejército y la Marina, Calderón tendrá a su servicio a 23 empleados administrativos, todo con cargo al erario.
El gobierno federal destinó al pago de pensiones, escoltas y personal de apoyo de los exmandatarios poco más de 209 millones de pesos.
De los últimos cuatro expresidentes, Ernesto Zedillo es el único que se negó a recibir el pago de pensión vitalicia.