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El bienestar de los niños es “un indicador importante” para medir la calidad de vida en una comunidad, sostuvo Eduardo Lugo Laguna, académico de la Facultad de Arquitectura de la BUAP.
A través de un comunicado, señaló que los menores requieren de ciertos satisfactores, como los espacios de juego, para lograr un desarrollo cognitivo, físico, emocional y social.
Dijo que actualmente, existe una carencia de este tipo de lugares y subrayó que los habilitados, no cuentan con las condiciones necesarias para motivar el crecimiento, la autonomía y las posibilidades de recreación.
Subrayó que dentro de 20 años, la capital poblana tendrá una población de 300 mil infantes; por lo que llamó a tomar en cuenta la generación de espacios para esparcimiento y establecer políticas enfocadas a los menores.
Mencionó que las zonas de juego deben ser accesibles y seguras para los más pequeños; en tanto, para los adolescentes, consideró recomendable colocar áreas de reunión para platicar y practicar deportes.
Finalmente, dijo que los padres deben estar conscientes sobre la importancia que tiene el juego en el desarrollo de los niños, por lo que es necesario promoverlo y evitar la saturación de actividades programadas.