Una de las principales características de todo buen gobierno es la transparencia. Pues al practicarla, genera confiabilidad, honestidad y corresponsabilidad, por parte de la estructura gubernamental, hacia sus ciudadanos.

Generando también, vínculos para la rendición de cuentas, indispensables para poder detectar y evitar actos de corrupción entre los funcionarios públicos en cualquier orden de gobierno.

Es por ello que para mostrarse “comprometidos”, los dos principales candidatos para la presidencia de Puebla han presentado su declaración patrimonial.

Esto con el fin de demostrar que sus pertenencias son totalmente lícitas, que fueron obtenidas a partir de un trabajo ético y que esto se traduzca en confianza, buscando el voto de los ciudadanos.

Pero ha sucedido exactamente lo contrario. Veamos por qué.

Por un lado, Tony Gali, el candidato de “Puebla Unida”, presentó un patrimonio valorado en 77 millones de pesos, tomando en cuenta propiedades de su esposa e hijos.


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Cantidad que se ha mostrado ostentosa ante la perspectiva de los ciudadanos. Provocando incertidumbre entre la opinión general.

Por el otro lado, el candidato de la coalición “5 de mayo”, Enrique Agüera Ibáñez, quien publicó un patrimonio de poco más de 20 millones de pesos, aclarando que no incluye las propiedades de sus hijas, esposa o familiares.

La interrogante es obligada ¿por qué no incluir los bienes de su esposa e hijas? ¿Qué se esconde?

Parece que el acto de presentar una declaración patrimonial, lejos de generar confianza y rectitud, produce grandes dudas entre los miembros de la sociedad

Sin duda alguna, el tema de la transparencia aún es incipiente en nuestro país. Pues apenas la ley de transparencia lleva poco más de diez años. Mientras en otras partes del mundo, como Finlandia, se practica desde hace siglos.

Concluyendo: Tony Gali presentó una fortuna, superando el patrimonio de cualquier funcionario del Estado. Sin embargo se mostró “honesto” pues incluso fue revisada ante notario.

Por otra parte, el ex rector hizo una incompleta y hasta risible declaración. Donde sus actos de lujos tanto los de él, como el de sus hijas no dan credibilidad a lo publicado.

Poniendo en tela de juicio la sinceridad de nuestros principales candidatos a la presidencia de Puebla, cada candidato verá el resultado de sus actos el día 7 de julio, cuando se dé a conocer la voluntad de la mayoría.

@jpablovallejo