Scarlett Johansson está de nuevo en medio de una polémica, ahora por protagonizar un anuncio censurado que se transmitiría el próximo domingo durante el Super Bowl.

El comercial muestra a la actriz promocionando Sodastream, producto de una empresa israelí que fabrica artículos para preparar bebidas gaseosas de sabores en casa.

Mientras disfruta de su bebida, la actriz dice: “Lo siento Coca-Cola y Pepsi”.