Nota del editor: El siguiente artículo fue escrito por la M.C.E. Araceli Badillo de la Concha, catedrática de la Licenciatura en Nutrición por la Universidad del Valle de Puebla (UVP).

CALOR_12Dentro de las nuevas licenciaturas de la Universidad del Valle de Puebla, la Licenciatura en Nutrición tiene una importante relación con la salud es por ello que damos la siguiente información:

El riñón es un órgano vital para el ser humano, interviene en los procesos de filtración y purificación de la sangre, en la homeostasis (equilibrio) del agua en el organismo y en la regulación del contenido de sodio, generando un equilibrio diario en plasma y líquido intersticial, lo cual determina el volumen de sangre y la presión arterial. Su exceso produce hiponantremia (transtorno electrolítico) que se caracteriza por debilidad, anorexia, vómito, cólicos abdominales, dolores de músculos esqueléticos y confusión mental.

Es por esta razón que se recomienda moderar el consumo de productos con altos contenidos de sales sódicas, principalmente encurtidos, embutidos, enlatados, bebidas carbonatadas, productos de la panificación, moderar el uso de sal en la mesa y adecuar el consumo de agua a los requerimientos energéticos diarios en proporción de 1 ml por kcal consumida para el adecuado balance hídrico.

El consumo que se recomienda a diario de sodio en una dieta normal es de 5000 mg al día, el cual debe estar repartido en el contenido de sodio natural de los alimentos, el contenido de sodio de los productos industrializados empleados en la elaboración de víveres y la sal agregada al prepararlos.

Cuando los riñones se ven afectados por una mala alimentación asociados a factores genéticos, fallo en los procesos metabólicos o como enfermedades derivadas de otras patologías se pueden presentar padecimientos como displasia renal, glomerulonefritis adquirida, síndrome nefrótico y la más común de ellas Insuficiencia renal. En donde el manejo nutricional del paciente con enfermedad renal dependerá de la gravedad y tipo de padecimiento.