Alrededor de 17 muertos y 160 personadas atrapadas dejó un corrimiento de tierras en el estado de Maharastra, el oeste de la India, tras cuatro días de intensas precipitaciones.
Cerca de 70 casas han quedado totalmente enterradas y más de 150 han sufrido daños. La falta de Internet y la deficiente red de telefonía móvil hacen más complejo el rescate.
El año pasado un desastre similar causó unas 6000 muertes en estado de Uttarakhand, al norte de la India.