Aunque las reformas de ayuntamientos poblanos para prohibir el uso de animales en circos se considera como un avance para erradicar el maltrato animal, la organización AnimaNaturalis considera que la ley estatal contra las agresiones hacia dichos seres vivos aún resulta inconsistente.
Adriana Celada, coordinadora de áreas de Animales en Cautiverio y Animales en Laboratorios en dicha agrupación, señala que la legislación vigente registra ambigüedades que dificultan la cancelación y sanción de dichas prácticas.
Entrevistada por Poblanerías en línea en la víspera de la aprobación de las prohibiciones en Puebla capital, pone como ejemplo el uso de animales para fines educativos; lo que va desde la compra de una mascota para un salón de clases hasta el uso de ejemplares para experimentos.
Asegura que mientras en lugares como el Distrito Federal, se prohíben dichas conductas y se exige abiertamente que las instituciones ocupen medidas alternativas, en Puebla sólo señala que las escuelas no deben maltratar a los animales si hay alternativas.
En (la ley d)el Distrito Federal dice explícitamente que ningún profesor puede obligar a que un alumno experimente con animales y no sólo no lo puede obligar, sino que tiene la obligación de proveerle un método alternativo para que pueda aprender”.
“En la legislación de Puebla no existen este tipo de artículos, solamente dice que no se pueden utilizar animales cuando puede se pueden utilizar otro tipo de alternativas. Quien haya redactado esta ley, debería saber que al menos hasta hoy, hay todo tipo de alternativas y no está justificado hasta nivel universitario, experimentar con animales”.
Agrega que ante la misma ambigüedad, las sociedades protectoras de animales podrían aprovecharse y denunciar a todas las universidades por usar animales; pero, razonó, sería un trabajo “sucio”.
Por esa razón, opina que la Ley para la Protección de los Animales en el Estado de Puebla aún no puede contarse entre las más avanzadas del país, como sí sucede con el Distrito Federal.
Circos, el primer paso
En ese contexto y al preguntar explícitamente sobre las recientes aprobaciones para prohibir animales en los circos, Adriana Celada señala que este es sólo el primer paso que apoya AnimaNaturalis para detener el maltrato animal.
Asegura que se trabaja en diversas campañas simultáneas y asegura que también se pretende detener el abuso en zoológicos, acuarios y delfinarios que presentan espectáculos similares.
No es todo lo que se necesita hacer; pero sí es un primer paso y si este es el paso que se está dando en este momento, claro que lo vamos a apoyar”.
Argumenta que los maltratos hacia los animales han logrado documentarse en diversas partes del mundo y en México, refiere que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ha realizado decomisos por esta razón; aunque no especifica cuántos.
Sostiene que además, su organización cuenta con estudios científicos con validez internacional, donde se han documentado trastornos en los animales por vivir en cautiverio y someterse a prácticas antinaturales, mismos que se han difundido entre legisladores.
No es una cuestión subjetiva… Hay muchos indicativos a nivel científico que demuestran cuando un animal está siendo objeto de abuso y cuándo no, y a nosotros nos queda sumamente claro que los animales que están en los circos, no sólo en los mexicanos, sufren de un abuso y de un maltrato”.
Adriana niega que AnimaNaturalis esté contra los circos con animales en sí mismos, sino contra actos que a su parecer, destruyen y además, merman fuentes de empleo para mexicanos dedicados a las artes circenses.
Por esa razón, opina que los empresarios sí podrán reformular sus espectáculos y ese sector económico no se pondrá en riesgo.
Hay mucho abuso animal en el país
La coordinadora de áreas de Animales en Cautiverio y Animales en Laboratorios de AnimaNaturalis opina que en el país, existe una fuerte cultura de maltrato a los animales.
Sin embargo, apunta que ello es producto de ver a estos seres vivos como objetos y con enseñar lo que denomina como “doble moral”, donde incluye el consumo de alimentos de origen animal y el regalar animales a los niños como mascotas; lo que, asegura, sólo se podrá cambiar a través de la educación.
Cabe recordar en ese contexto, que hasta el año pasado, tan sólo el Ayuntamiento de Puebla reportaba que cada día, su área de Control Animal atrapaba 100 perros abandonados; de los cuales, 96 se sacrificaban.
Por último, sostiene que el uso de animales para producción alimentaria es la segunda forma de maltrato animal más problemática del país, debido a la cantidad de ejemplares que se sacrifican y que son utilizados diariamente como máquinas.
Sólo por encima de esta situación, ubica el uso de animales para experimentar en la industria farmacéutica, donde señala que se argumenta subsistencia para incurrir en abusos.