Once estudiantes de ingeniería de la BUAP fueron seleccionados por el Programa México-Francia Ingenieros Tecnología (Mexfitec) 2014, que los gobiernos de ambas naciones promueven con el objetivo de impulsar el desarrollo profesional de sus becarios a través de la generación de proyectos de colaboración académica.
Estos once estudiantes forman parte de un selecto grupo de universitarios de ingeniería: 300 estudiantes de diez universidades del país, centros de enseñanza superior acreditadas para participar en este programa por su intensa colaboración con los académicos francoparlantes.
Javier Díaz Galindo, futuro ingeniero en Mecatrónica por la Facultad de Ciencias de la Electrónica de la Universidad, es uno de los miembros de este grupo élite de la Institución. Considera que el haberse asegurado un lugar en esta lista es uno de sus logros más importantes en su historia como estudiante: “El haberme asegurado un lugar en esta lista es uno de mis logros más importantes; el otro, el haber quedado en la BUAP”.
Él y sus compañeros fueron seleccionados tras pasar diversas pruebas y cumplir con los requisitos que la convocatoria Mexfitec 2014 establece: promedio escolar superior a 8.5, buen nivel del idioma francés y, sobre todo, tener los objetivos claros en cuanto a metas profesionales se refiere.
Deseo empaparme de las nuevas tendencias de la ciencia y la tecnología; aprender su metodología de investigación. También busco perfeccionar mi nivel de francés y, como valor agregado, conocer la cultura francesa y la de otros países”.
Eso quiere Javier, quien en esta oportunidad, desarrolla su capacidad de adaptación a un entorno completamente distinto al mexicano pues intercambia ideas y experiencias con colegas y amigos de toda Europa. Se siente feliz de estar en el viejo continente.
La oportunidad para él y sus compañeros fue posible gracias a la colaboración y la vinculación de la BUAP con instituciones del país franco, que desde hace varios años ha permitido la gestación de proyectos académicos internacionales.
Javier explicó que en octubre del 2013, la Dirección General de Relaciones Internacionales e Intercambio Académico (DGRIIA) de la BUAP, hizo extensiva esta convocatoria para movilidad internacional.
Él realizó diversas entrevistas y un examen en francés durante el proceso de selección. Tras tener el visto bueno de la Institución, viajó a la Ciudad de México para concertar su proceso. Unas semanas después recibió la noticia: “estás adentro, viajarás a Francia”.
Cabe resaltar que en este programa sólo pueden participar los estudiantes que pertenezcan a instituciones mexicanas vinculadas con al menos dos de las 70 universidades de Francia pertenecientes al programa y que colaboran con instituciones del país.
En el caso particular de la BUAP, en este año las sinergias son con el Instituto Nacional Politécnico de Toulouse y con las cinco sedes del Instituto Nacional de Ciencias Aplicadas, en especial con el campus de Lyon.
Con este esfuerzo compartido entre instituciones, así como con el apoyo de la Secretaría de Educación Pública y el Ministerio de Educación de Francia, los estudiantes de la Máxima Casa de Estudios de Puebla: seis de la Facultad de Ciencias de la Electrónica, cuatro de la Facultad de Ingeniería y una de la Facultad de Ingeniería Química, podrán realizar una estancia de aproximadamente diez meses (dos periodos escolares) para complementar su formación académica con una visión global.
Ofreceré mi conocimiento y experiencia adquiridos a los siguientes estudiantes interesados en realizar una movilidad internacional por medio de Mexfitec. De ser posible colaborar con la DGRIIA, aportarle mis ideas modo de retroalimentación, a fin de mejorar la atención y servicio a los estudiantes”, eso, eso será cuando regrese.
Los once estudiantes de la BUAP que mostraron interés en los programas de movilidad académica y que evidenciaron sus aptitudes académicas y profesionales, superando a la gran cantidad de estudiantes de otras universidades, tuvieron un resultado favorable pues incluso el mismo comité evaluador autorizó que fueran once y no diez los universitarios beneficiados por Mexfitec, pese a que el programa sólo admite diez estudiantes por institución.
Ghislaine Arriola Cervantes, responsable de Movilidad Académica de la Facultad de Ingeniería de la BUAP, señaló que la misión de los alumnos “es cumplir con asignaturas curriculares de su licenciatura que serán revalidadas a su regreso. Ellos estarán diez meses en el extranjero”.
Previo a sus cursos curriculares, agregó, los universitarios tendrán cinco semanas de internación cultural y lingüística en el Instituto Cavilam, de Vichy, Francia, con el apoyo del gobierno de este país con el fin de que los mexicanos conozcan una nueva cultura”.
Una vez terminada su estancia en Francia, Javier se postulará para una maestría en el extranjero, en Alemania, para especializarse en el área de gestión y desarrollo de proyectos de investigación aplicados a todo tipo industria. Tiene en mente iniciar su propio negocio: la venta y distribución de ropa de skate y surf.
Este universitario, quien además de los deportes extremos gusta de la lectura, el cine, el teatro; del patinaje en longboard y de la interpretación musical (toca guitarra), considera que su profesión ideal es aquella que le permita integrarse en el sector industrial, en un área enfocada al desarrollo de proyectos tecnológicos, “que impacten de forma positiva a la sociedad”. Cree que su experiencia en Francia, y su apalancamiento en la BUAP, lo llevará por ese camino.