Cada seis meses diez equipos hacen hasta lo imposible por no sentarse en él, durante diecisiete jornadas su único objetivo es sentarse en la banqueta con tal de no hacerlo en el incómodo y anticuado asiento de la realeza de la Liga MX.
Los otros ocho menos malos, con ganas y con flojera, con merecimientos o sin merecerlo, se encuentran a sólo seis pasos de reposar sus asentaderas en el trono de monarcas absolutos del futbol mexicano al menos un semestre completito.
Con el reglamento en la mano, tres de los cuatro involucrados se acercaron dos pasos al sobrevalorado trono. Águilas, Tigres y Diablos hicieron válida la opción de mejor posición en la tabla y con empate en el global mandaron ya de vacaciones a Pumas, Tuzos y Jaguares.
Ninguno de los cuatro candidatos a ocupar tan sofisticado sitio parece llegar con grandes argumentos a la antesala de la final decembrina. Uno se tardó 434 minutos en anotar gol en los cuatro clásicos que jugó este torneo, el rayado tiró 90 minutos a la basura para recomponer todo en los otros 90 y los otros dos se dedicaron alrededor de 60 minutos a defender la ventaja jugando en su propio estadio y ante su gente.
América vs Monterrey y Tigres vs Toluca son ese tipo de combinaciones que en el papel siempre lucen atractivas pero que hoy dadas las circunstancias en las que llegan a esta instancia hacen dudar al más villamelón de la cuadra.
El todopoderoso y súper líder América llega a la ronda de los cuatro mejores plagado de dudas y claroscuros. Tras el papelón de media semana en CU donde lució inofensivo, para la vuelta con más ímpetu que futbol, con un salvador Moisés Muñoz y con un cabezazo de Goltz les alcanzó para avanzar. Atrás siguen siendo muy endebles y arriba, Oribe Peralta soltero, sigue sin encontrar pareja.
Monterrey es la bipolaridad hecha equipo, tiraron media eliminatoria en casa y a la hora buena se arrepintieron quitándole de la bolsa el boleto a los rojinegros sin Suazo, “Chelito”, Cardozo pero con el demonio Pabón. De dar su peor partido a dar el mejor partido en el torneo en tan sólo tres días. Bipolares.
Del otro lado del salón de la justicia, Tigres consintió de más a Pachuca y estuvo cerca de pagarlo caro, luego del empate de Hugo Ayala en el minuto 37, se dedicaron a cuidar la ventaja del reglamento a lo “Tuca” Ferretti, esperando y cediendo la iniciativa al tuzo, jugaron con fuego y no se quemaron. Jugando en el infierno tal vez no corran con la misma suerte.
“Il diabolo” siempre presente en estas rondas, parece que siempre supo que Jaguares no podría darles la vuelta, a pesar de las atajadas de Talavera, Cardozo frío y calculador, administró los cambios, los tiempos y el resultado. Nunca se sintió fuera a pesar de darle la pelota a los chiapanecos. “Más sabe el diablo por viejo, que por diablo”.
Con el respaldo duro como una roca, con el asiento frío como la nieve, con los cimientos desvencijados y con la cubierta dorada hurtada hasta de la base. El trono de la Liga MX reclama a un nuevo rey y monarca los próximos seis meses, reclama dueño y reclama poseedor.
Con equipos bipolares como Monterrey, con equipos ratoneros como Tigres y Toluca y con equipos confundidos como el América, el trono tendrá que ocuparse a partir del catorce de diciembre, un trono acorde a sus candidatos. Un trono, “semi” profesional.
@tonysanchezcam
POB/GACC