Puebla tiene la Tasa de Mortalidad Infantil (TMI) más alta del país, con 16 fallecimientos por cada 100 mil nacidos, reveló la organización Save the Children.Bebé

La desigualdad social, la incorrecta aplicación de programas sociales y subejercicios presupuestales en estos esquemas son los factores que inciden en las muertes de los menores, de acuerdo con el informe “Salud Infantil en México. Análisis exploratorio de la política pública presupuestal 2000-2015”.

La mortalidad materna e infantil representa una violación al derecho a la salud y alimentación, además de reflejar la desigualdad social del país, refirió el estudio.

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Nuevo León, el índice más bajo

La TMI media en México es de 13 defunciones por cada 100 mil nacidos vivos.

El índice más bajo lo presentó Nuevo León, con 9 por cada 100 mil menores de cinco años, mientras que la más alta fue de Puebla, con 16 muertes por cada 100 mil niños.

Además de la entidad, Hidalgo, Oaxaca, Chiapas, Chihuahua, Baja California, México, Tlaxcala y Guerrero superan el promedio.

Los estados con la TMI más baja son Coahuila, Sinaloa, Aguascalientes, Colima, Nayarit y Zacatecas.

Un niño que nace en Nuevo León tiene mayores posibilidades de sobrevivir en su primer año de vida que una niña que nace en Puebla o en Guerrero”, señaló el estudio.

De 1990 a 2013, la tasa de mortalidad infantil nacional decreció, al pasar de 32.7 a 12.7 muertes por cada 100 mil nacimientos.

Sin embargo, la meta del programa Objetivos del Milenio establece 10.8 defunciones para 2015.

Las diferencias sociales, la marginación y falta de oportunidades son las causan que incrementan la mortalidad infantil.

También, los subejercicios presupuestales, así como la falta de planeación a largo plazo en programas de salud también influyen en la TMI.

Los programas de salud analizados fueron:

  1. Unidades Médicas Móviles
  2. Seguro Médico Siglo XXI
  3. Prospera
  4. IMSS Prospera
  5. Programa de Apoyo Alimentario
  6. Salud Materna y Parental

A excepción de Prospera, el resto de los programas mostraron niveles importantes de subejecución, refirió el estudio de Save the Children.

 

POB/BDH