En México, alrededor de un millón y medio de personas con discapacidad en edad de trabajar, carecen de empleo, dio a conocer Jesús Toledano Landero, director del Consejo Nacional para el Desarrollo y la Integración de las Personas con Discapacidad (Conadis).Discapacidad

En conferencia de prensa para presentar el cuarto “Foro de empresas: Iberoamérica Incluye”, que se realizará este jueves y viernes en la Ciudad de México, señaló que hace falta avanzar en la inclusión, pues “no todas las entidades están en consonancia con las políticas federales”.

Recordó que a raíz de la reforma laboral y de la presentación del Programa Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con Discapacidad, se han dado avances en el acceso de personas con discapacidad al empleo formal y decente, tal como lo define la OIT.

De hecho, comentó que entre 2013 y 2014, alrededor de 20 mil personas con distintas discapacidades se incorporaron a empleos formales, y el año pasado, 320 compañías obtuvieron el Distintivo de Empresas Incluyentes.

No obstante, persisten retos en la materia, ya que 80 por ciento de quienes pertenecen a este grupo y están en condiciones de trabajar, sólo concluyeron la primaria, lo cual constituye una limitante para acceder al trabajo.

De ahí la importancia de un foro como este, donde especialistas de México, Chile, Uruguay, Ecuador y España, entre otros países, intercambiarán información sobre las mejores prácticas para incluir a personas con discapacidad en el empleo.


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Los retos actuales consisten en eliminar la discriminación y la exclusión; que se garantice pago igual a trabajo igual (lo que en ocasiones no pasa con grupos vulnerables como personas con discapacidad, de la tercera edad, mujeres o jóvenes) y que las empresas cambien su mentalidad.

Toledano Landero señaló que como no todas las entidades están en consonancia con esta política pública federal –que se puso en marcha el año pasado— es indispensable avanzar en su implementación en los niveles estatal y municipal.

Las empresas tienen que comprender que deben ver a sus empleados con discapacidad, desde la perspectiva de sus capacidades, no de sus limitaciones, aunque es necesario darles mayor capacitación, reconoció el funcionario.

También señaló que muchas personas con discapacidad están en trabajos informales, hay más hombres que mujeres con discapacidad trabajando y en ocasiones, el pago por trabajos iguales es diferente.

Sin embargo, se dijo optimista pues ya se han diseñado varios programas de proyectos productivos para incorporar a estas personas al empleo formal y algunas empresas grandes o pequeñas ya tienen un importante número de personas contratadas.

Al respecto citó el caso de una empresa automotriz alemana con sede en Puebla, que tiene contratadas a mil 200 personas con discapacidad, si bien la propia ONU ha señalado que en México hace falta más labor en el tema de la inclusión en trabajo decente.

 

POB/BDH