La historia de la plantación de caña de azúcar en la región de Atencingo data de la época de la Colonia, en las tierras de las haciendas se cultivaba para después procesar en pequeños trapiches que fabricaban azúcar piloncillo.

Ubicada al sur del estado de Puebla, en colindancia con Morelos, la región abarca 11 municipios del primero y tres del estados del segundo.

Después de La Revolución, William Jenkins, cónsul estadounidense, se convirtió en el propietario de las tierras que pertenecían a nueve haciendas dedicadas a la producción de la caña y azúcar.

Concentrando la producción en Atencingo mediante la modernización del ingenio logró enriquecerse fuertemente, y en colaboración con el gobernador Maximino Ávila Camacho negoció con el gobierno federal durante la Reforma Agraria que era implementada por el presidente Lázaro Cárdenas.

Tras un complejo proceso en el cual ninguna de las partes quedaba conforme, ya que era difícil repartir las tierras en pequeñas parcelas o ejidos debido a la necesidad de uniformar el cultivo de caña y que quienes conocían el proceso de producción explotaban a los campesinos repitiéndose la historia de los terratenientes, el gobierno intervino imponiendo una ley donde quedaran establecidos derechos y obligaciones de cada parte.

La tierra quedó en manos de campesinos y el ingenio en manos de particulares hasta finales de la década de 1950, cuando el gobierno realiza la expropiación del ingenio azucarero.

Debido a que el fin de la caña es la industrialización para la producción de azúcar se lleva un estricto proceso, desde antes de la zafra, se decide qué tipo de caña sembrar, se valora cuántas toneladas y de que calidad será entregado en fechas agendadas al ingenio.

La caña se somete a un estrés un mes antes de la cosecha, se elimina el suministro de agua para que concentre más azúcares, y en el momento que se prende fuego a la parcela para quemar la maleza, empieza a disminuir su calidad, por lo tanto debe pasar el menor tiempo posible entre este momento y la entrega para su molienda.

Dentro del ingenio se lleva un estricto control mediante pruebas químicas con las cuales se obtienen datos precioso sobre la calidad y cantidad de azúcar que se produce.

 

POB/BDH