La Estación Espacial Internacional recibió una buena limpieza al lanzar una cápsula con 1.5 toneladas de basura.

Un par de astronautas de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA), lanzaron este viernes la cápsula que se desintegrará sobre el Pacífico al reingresar a la atmósfera el sábado.

Orbital ATK, proveedor de la NASA, envió la cápsula a la Estación Espacial desde diciembre, con alimentos, ropa y demás artículos.

Los astronautas la vaciaron y posteriormente rellenaron con basura y equipos en desuso.

Scott Kelly, comandante y Timothy Kopra, astronauta, ambos estadunidenses a bordo, emitieron órdenes por computadora para liberar la cápsula Cygnus.

La vista de 400 kilómetros de altura sobre la Tierra mostró el alejamiento de la cápsula, con dos alas circulares, como una especie de paraguas abiertos.

Kelly terminará en dos semanas la misión de un año para la NASA, y agradeció a todos los que trabajaron en la Cygnus “este gran vehículo”.

“Ha sido un placer” dijo el astronauta.
“Hermoso lanzamiento” respondió el control de la misión.

A fines de marzo, Orbital ATK lanzará otra cápsula Cygnus desde Cabo Cañaveral.

El vuelo fue aplazado debido a que un hongo negro contaminó una parte de la carga y fue necesario desinfectar todo.

La NASA ha contratado empresas privadas para los envíos de este tipo y concentra sus esfuerzos en cómo enviar astronautas más allá de la órbita terrestre, siendo Marte el principal objetivo.

La misma dinámica se mantendrá con las tripulaciones de la estación espacial en 2017.

Por el momento los astronautas estadunidenses viajan con los rusos.

 

POB/BDH