Rodrigo Duterte, presidente electo de Filipinas, ofreció 5,5 millones de pesos filipinos, cerca de 2,161,000 pesos mexicanos, por cada narcotraficante muerto en Cebú, informaron los medios locales.
La ciudad filipina de Cebú ya ofrecía una cantidad por cada narcotraficante abatido, la cual fue impulsada por Tomás Osmeña, alcalde de la ciudad, pero que es hasta 100 veces menor de la ofrecida por Duterte, ya que solo se hacía entrega de 50,000 pesos filipinos, poco menos de 20,000 pesos mexicanos.
El presidente electo planea en su gobierno un programa centrado en acabar con la delincuencia en el país, en una fiesta el ocho de junio organizada por un grupo privado para Duterte, explicó que conoce sobre agentes de la policía involucrados en operaciones antidrogas que no declaran el volumen real de lo que incautan en algo que aseguró debe de parar.
“No quiero llegar al extremo, pero estoy pidiendo que esto se revierta. Si no puedo hacerlo de la manera correcta, tendré que hacerlo de alguna incorrecta, porque tengo el deber, bajo juramente, de proteger a la República”, dijo Duterte de acuerdo al diario Inquirer.
Ya en declaraciones hechas la semana pasada, el presidente electo había animado a la población a actuar contra los narcotraficantes, señalando a los ciudadanos que cuentan con autorización para disparar si se resisten y ponen la vida de otros en peligro.
Los narcotraficantes ofrecen recompensa por Duterte
De acuerdo a informes de la policía de Filipinas, han detectado ofertas por un millón de dólares para matar a Rodrigo Duterte, señalando que en un principio la oferta era de unos 217,000 dólares pero que nadie estaba dispuesto a hacer el trabajo por esa cifra.
Ronald Dela Rosa, próximo jefe de la policía del país, dijo que la cantidad de un millón de dólares se ha comenzado a ofrecer en las calles por su muerte o la del presidente electo, como respuesta a su ataque contra los grupos de crimen.
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