Derivado de la auditoría que se realiza en el Industrial de Abasto de Puebla (IDAP), se detectaron siete empresas fantasmas que prestaban servicios a dicho organismo.

El presidente de Servicios Públicos, Iván Galindo Castillejos, indicó que se tenía un adeudo de casi medio millón de pesos.

Sin embargo, estos ya no forman parte de los pasivos del rastro municipal, dado que se comprobó la inexistencia de las empresas.

El regidor señaló que continuarán las investigaciones en el organismo, dado que se podrían fincar responsabilidades al extitular, Jaime Carrilles Uriarte, por lo que confió en que lleguen al fondo de la auditoría.

POB/FOL