Librerías Gandhi es una de las marcas más reconocidas por su polémica publicidad; sin embargo, pocos saben el origen de esta innovadora estrategia de mercadotecnia.
Alberto Achar Abadi, gerente de Mercadotecnia de Librerías Gandhi fue quien hace 20 años propuso una publicidad distinta para atraer al mercado mexicano.
El objetivo de Achar siempre ha sido hablarle no solo a un grupo de personas, si no a una mayoría.
La cadena de librerías es una empresa familiar, donde el creativo inició como vendedor en la sucursal de Lomas de Chapultepec.
A sus 19 años, inició su vida laboral en la librería de su tío Mauricio Achar, después de cuatro años de trabajar en el área de Audio y Video, Alberto quería poner su “granito de arena” para que la compañía creciera.
Entonces, le propuso a su tío crear un área de mercadotecnia para potencializar y posicionar la marca entre un mercado más grande.
Hablar de mercadotecnia hace cuatro años, en México, era muy complicado”, dijo Alberto en entrevista para Marcas y Medios al Aire.
Al ser aceptada su propuesta, el departamento inició preparando publicidad para medios impresos, medios que solo llegarían a los “intelectuales”.
Más tarde, Achar decidió llevar Gandhi a las calles y colocar espectaculares en la calle con un color amarillo, letras negras y su logotipo morado.
Después de esta iniciativa, la marca comenzó a acercarse a los clientes, ya no era una marca lejana o solo para los intelectuales como se creía, mencionó Alberto.
Esta publicidad llegó en 1998 para quedarse, pues actualmente las personas se han apropiado de esta publicidad para expresar sus opiniones en diversos temas, incluida la política.
Librerías Ghandi ha pasado por múltiples escándalos y bajas en sus ventas por la publicidad, aún así la marca defiende la libertad de expresión y es definida por el mismo Alberto Achar como “un intelectual alivianado y abierto”.
POB/FOL