Lograr que los niños tengan un desarrollo integral a través de la danza aérea y el jazz, así como crear nuevos solistas en México, son los objetivos que tiene el programa “Danza Manía” de la Academia Cultural y Artística de Puebla (ACAP), escuela incorporada al Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).
Marco Antonio Michel, director académico de ACAP, explicó en entrevista con Poblanerías en línea, que “Danza Manía” es un programa de 3 años enfocado a niños de 4 a 7 años de edad, que busca inculcar el arte y la creatividad en los niños.
El programa inicia con 4 horas a la semana de clases hasta llegar a un total de 8 horas, en las que se les enseña técnica de danza, acrobacias, jazz y exploración coreográfica.
El proyecto lleva a que el infante tenga no solamente un dominio técnico o elasticidad y acrobacia; sino también mucha seguridad, desarrollo de creatividad. Los empujamos a que en un momento ya sean intérpretes y estamos entusiasmados de ver que para los niños ha tenido un impacto muy fuerte”, comenta.
La idea surgió de la necesidad de incluir el arte como parte de la educación de los niños y así las próximas generaciones puedan volver hacer de la cultura una prioridad.
Además, Marco Antonio considera que es una forma eficaz de acercar a los menores a un entretenimiento de mejor calidad que el que ofrecen los dispositivos móviles o los videojuegos:
La única manera de atraer a los niños y dejen el teléfono y los videojuegos es dándoles algo de mayor calidad en el entretenimiento y la diversión, entonces cuando ellos tienen el contacto al desarrollo artístico se logra esta parte.
La educación tradicional tiene su razón de ser, pero por ejemplo ahora en el nuevo programa educativo viene el arte como un elemento fundamental obligatorio. Esto es debido a que las autoridades se han dado cuenta que el arte es una buena forma de erradicar males del mundo”, comenta.
Ser niño otra vez
Rodrigo Martínez y Ángela Inés García, docentes en el programa “Danza Manía”, platican de cómo es la experiencia de trabajar con niños de tan corta edad.
Tener paciencia, ayudar a los infantes a vencer miedos, así como tener la disposición de enseñarles jugando, son algunos de los retos a los que se tienen que enfrentar los profesores.
Lo más difícil es la paciencia, agarrarles la onda cada niña, porque cada una es diferente. Debes de entender el proceso en el que se desenvuelve cada niño, ver su coordinación, cuanto pueden trabajar, cuántos son hábiles. Hay muchas niñas que no tienen el talento tan desarrollado y hay que trabajar más con ellas”
Debes de aprender a reconocer donde hay talento. A esta edad ellas lo ven como un juego, vienen a divertirse y jugar, pero al final de cuentas están aprendiendo una disciplina, , explica Rodrigo, maestro de jazz.
Por su parte, Angélica, maestra de danza aérea de niños, platica que enseñar esta disciplina demanda mucha disposición de jugar con ellos y hacer de las normas algo atractivo y divertido.
Yo creo que se tiene que estar dispuesto a ser niño otra vez, ponerse a su altura y jugar con ellos. Es un poco más difícil cuando estás en la posición de decir ‘yo soy la autoridad y ustedes tienen que obedecerme’. Se necesita proponerles formas de moverse, de jugar y que entres al mismo juego que ellas.
Platica que una de las situaciones más comunes a las que se enfrenta son los miedos que tienen las niñas de querer hacer las cosas, por lo que primero las auxilia a hacer los movimientos para que vean que sí pueden y así posteriormente se atrevan a hacerlos solas.
Los beneficios de la danza a corta edad
Ambos maestros coincidieron que al practicar este tipo de disciplina a edades tan tempranas, los niños tienen diversos beneficios como: seguridad, aprender a trabajar en equipo, ser líderes, desarrollar patrones de movimiento, flexibilidad y coordinación.
Más que la cuestión técnica es la corporal, que aprendan a desarrollarse, moverse mejor y que tengan una mejor relación con las demás personas.
Aprenden técnica de danza, les da proyección, seguridad y aumenta en gran medida su autoestima, yo creo que si a una de ellas la pones frente a un micrófono a dar una conferencia, lo va a hacer sin problema, porque se sienten seguras de pararse en frente de un público.
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POB/LFJ