Puebla está pasando por una crisis de seguridad y violencia, la más grave en su historia y las estrategias para detenerla deterioran el bienestar de la sociedad.
Entre el “huachicol”, los asaltos y los asesinatos, Puebla está perdiendo su imagen de un sitio seguro.
La incidencia de delitos de alto impacto en el primer trimestre de 2017 es la mayor en comparación con años anteriores, de acuerdo con estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
México ha rebasado sus máximos históricos durante este sexenio, la administración de Enrique Peña Nieto ha sumado más muertos que la de Felipe Calderón, quien le declaró la guerra al crimen organizado.
Las causas son muchas, no hay un solo factor; la lucha entre grupos de la delincuencia organizada y así como la debilidad, incompetencia y corrupción de las autoridades son algunas de ellas.
Todas estas razones se han sumado para hacer de este el peor inicio de año para México, incluyendo Puebla.
Puebla supera sus “medias”
Marzo de 2017 será recordado como el mes en donde se llegó a la mayor cifra de homicidios dolosos alcanzada desde junio de 2011, indica el Reporte Sobre Delitos de Alto Impacto elaborado por el Observatorio Nacional Ciudadano (ONC).

Foto: Agencia Enfoque
Uno de los delitos que más se elevó este 2017, es el homicidio tanto doloso como culposo.
El homicidio doloso se caracteriza porque el criminal busca intencionalmente terminar con la vida de otra persona, bajo estas circunstancias el delincuente es culpable, incluso si no logra su cometido.
En contraste, si una persona provoca la muerte de otro por una acción negligente, se cataloga como homicidio culposo o involuntario.
El ONC estudió más de 2 mil carpetas de investigación por homicidio doloso solo en marzo de 2017; en los resultados se determinó que más de 1,294 de estos casos se perpetuaron con arma de fuego, 268 con armas blancas (navaja, cuchillo o cualquier objeto punzocortante), 410 con algún otro medio y 48 más no se determinaron.
México no había tenido tan altas estadísticas desde enero de 1997.
Con estos resultados, ¿por qué se habla de que hay mejoras en materia de seguridad?
La educación, la salud y la seguridad son algunos de los temas que se evalúan y analizan a nivel nacional y las autoridades eligen entregar sus resultados comparándose con otros, así no “asustan tanto”.
A nivel nacional, media de homicidio aumentó 11.90% solo en un año y doce entidades la superaron, incluyendo Puebla, donde este delito incrementó 43.52%.
El Semáforo Delictivo, un proyecto social ciudadano que promueve el buen gobierno por medio de la presión ciudadana, encendió cuatro de los ocho focos rojos que evalúa para Puebla, entre ellos, el homicidio.
Según la tasa nacional, Puebla se mantuvo, pues mientras el promedio de homicidios en marzo 2017 fue de 1.5, el estado apenas alcanzó el 0.9.
Sin embargo, los poblanos “no pueden cantar victoria”. Sí, el Estado es seguro, si se compara con Guerrero donde el promedio fue 4.9, Colima (4.8), Baja California Sur (4.5) o Chihuahua que promedio 3.9, pero no todo “es miel sobre hojuelas”. 0.9 es una cifra distante a 4.9, pero el estado ha superado su propia media histórica.
La media de homicidios en Puebla es de 40 incidentes, su estadística actual alcanza los 56.
Los homicidios en primavera
Marzo de 2017 sumó 2,256 víctimas de homicidio doloso y 1,598 de homicidio culposo a nivel nacional, cifras históricas, según los registros oficiales.

Foto: Agencia Enfoque
Puebla cosechó su buena parte, pues se coló en dos de los tres “top 10” presentados por el ONC.
La media nacional de carpetas de investigación por homicidio doloso es de 63.13, Puebla la superó por más de diez casos. Y hablando de número de víctimas, la media nacional se ubica en 7.38, Puebla acumuló 8.
Las organizaciones delincuenciales siguen ganando terreno y las autoridades no logran establecer la estrategia ideal. Mientras tanto, las víctimas de homicidio se seguirán acumulando.
¿La población se acostumbrará a vivir con miedo? El homicidio no es el único delito que aumenta progresivamente, muchos otros también muestras estadísticas alarmantes.
El escenario tampoco es nuevo, los homicidios son la manifestación más dolorosa de la violencia, pues generan una sensación de miedo entre la población difícil de controlar, ¿cuántas otras fosas clandestinas se encontrarán?
El 2017 apenas va en su quinto mes, habrá que esperar las estadísticas de fin de año.
Bajo este escenario el ONC destaca que: “nos encontramos muy lejos de lograr un México en paz, con instituciones sólidas, donde se respeten los derechos humanos y donde los ciudadanos sean capaces de exigir cuentas a sus representantes”.
POB/LFJ