La Procuraduría General de la República (PGR) acusó a Pablo Morales Ugalde, exalcalde de Palmar de Bravo, del desvío de 20 millones de pesos, recursos que presuntamente son del municipio y provienen de la venta de combustible robado.
De acuerdo con información de Expansión, el poblano habría desplazado grandes cantidades de ese dinero a cuentas bancarias de su hija y de uno de sus empleados.
Con los elementos de prueba aportados por el Ministerio Público de la Federación, el Juez de Control consideró que el imputado desvió recursos de las cuentas del municipio a diversos instrumentos financieros de terceras personas, quienes además recibieron depósitos millonarios”, dice la Procuraduría en un comunicado.
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