La ciudad de Puebla se inunda con menos de la mitad de la cantidad de lluvia con la que lo hacía en los años cincuenta, esto se debe principalmente a la deforestación, la urbanización desordenada y las obras inadecuadas que se han realizado durante las últimas décadas.
En el “Análisis de la vulnerabilidad en las zonas con peligro a inundación en la Ciudad de Puebla”, Julio Marcelo Ramírez Flores, presidente del Colegio de Urbanistas y Diseñadores Ambientales del Estado de Puebla (Cudaep), observó que con el paso de los años, se necesita menos cantidad de agua para que la capital del estado se inunde.
Los datos de la estación meteorológica en el edificio Carolino indican que en 1958 una precipitación de 50 milímetros cúbicos por hora (mm3/h) generó daños estructurales en viviendas, pero en 1996 con lluvias de 20.6 mm3/h hubo daños en la infraestructura vial, escuelas, viviendas y diez pérdidas humanas.
Esto significa que con el 41.2% de las lluvias de 1958 se generó un desastre mayor 38 años después. Según Julio Marcelo Ramírez esa tendencia continuará.
Sin embargo para Gustavo Ariza Salvatori, titular de Protección Civil del municipio, el motivo por el cual la ciudad se anega es porque la basura tapa las coladeras y la falta de desazolve del drenaje.
Inminente riesgo de inundación
El Atlas Nacional de Riesgos indica que para la ciudad de Puebla los principales riesgos son la susceptibilidad de laderas, por sustancias inflamables, inundaciones, tormentas eléctricas, caídas de granizo y eventos sísmicos. En total se han decretado seis contingencias, desastres y emergencias hidrometeorológicas.
Según el Atlas Municipal de Riesgos, elaborado en 2012, hay 64 colonias con un alto riesgo de inundación; 22 por el río Atoyac, seis por el río San Francisco, 27 por el río Alseseca y nueve por arroyos. Además de las colonias que no están municipalizadas.
Ramírez Flores, también integrante del Consejo ciudadano de Protección Civil, explicó durante una entrevista con Poblanerías en línea que buena parte de las inundaciones en la ciudad de Puebla se deben a la urbanización desordenada, pues algunas colonias se construyeron cerca de los ríos o barrancas, aunque son zonas federales.
También porque se edificó en lugares donde históricamente se forman ríos temporales (solo en épocas de lluvia) y donde se encuentran ríos tributarios (que alimentan a los ríos principales).
Otra cuestión que destacó el especialista es que desde hace varias décadas se hicieron obras que a la larga han generado más problemas. Una de ellas es el entubamiento del río San Francisco, ya que se desvió parte de su corriente a los ríos Alseseca y Atoyac haciéndolos más proclives a desbordarse.
La deforestación en la Malinche y Sierra Nevada son las causantes de crecidas o aluviones que afectan a la ciudad de Puebla, debido a que sin vegetación el suelo pierde capacidad de captación de agua y hay más escurrimientos.
De acuerdo con Índice de Riesgo de Deforestación, elaborado por el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), Puebla es uno de los diez estados de México con más riesgo de deforestación y en siete años se perderán 36,785 hectáreas forestales.
Basura también afecta
En entrevista, Gustavo Ariza Salvatori dijo que las inundaciones en la capital son provocadas por el azolve (lodo o basura que obstruye un conducto de agua) y también porque en la parte superficial las alcantarillas presentan mucha basura.
Los puntos que Protección Civil tiene detectados como focos rojos de inundaciones son: Calzada Zavaleta en sus intersecciones con Camino Real a Cholula y la Recta a Cholula, así como el bulevar Forjadores. Al menos este año no hay problemas en barrancas o sitios ríos porque se realizaron acciones preventivas como el dragado de ríos y arroyos, así como el desazolve de los drenajes.
No ha habido ningún problema en este momento, incluso, en los ríos el máximo nivel ha sido de 70% y de allí no han pasado, no hemos tenido ningún desbordamiento o algún cause de agua natural bloqueado o taponeado”, agregó Gustavo Ariza.
Con respecto a la basura, el funcionario dijo que los y las habitantes ayudan a evitar las inundaciones no tirando basura en las calles, limpiando su acera y procurando que no haya objetos que bloqueen las coladeras.
Según el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), 50% de los encharcamientos e inundaciones en temporada de lluvias son provocados por la basura. En Puebla capital se generan un millón 700 mil toneladas de basura al día, las cuales son recogidas por 80 vehículos y 643 trabajadores de limpieza.
Gestiones para reducir riesgos
En su tesis doctoral, Julio Marcelo Ramírez desarrolló el proyecto “Gestión para la Reducción del Riesgo de Inundación en el Municipio de Puebla”, donde plantea la organización ciudadana como una forma de disminuir los riesgos.
Desde la perspectiva del especialista, una comunidad vive en riesgo porque en parte ha contribuido a estar en esta situación; por ejemplo, al construir viviendas en zonas federales o a no avisar a las autoridades de cierto tipo de construcciones que realiza por miedo a recibir una multa o que se clausure la obra. Por eso mismo la ciudadanía puede contribuir a mejorar su situación.
El primer paso es la organización vecinal para realizar acciones, como la limpieza de la cuenca de los ríos, vigilancia para que no se tire basura en las barrancas o material de construcción, pero también para pedir a las autoridades que hagan obras que prevengan los desastres, como colocar barreras de “peine” en las partes altas de la cuenca para evitar que el lodo y la basura taponen las partes bajas.
El doctor en Procesos Territoriales, Región, Ciudad, Arquitectura y Patrimonio sugirió, además, que el gobierno federal inscriba en el Registro Público de la Propiedad las zonas federales, como barrancas, zonas boscosas y lechos de río, para no se expidan títulos de propiedad a particulares de esos predios.
POB/LFJ