En Puebla por cada mil kilos de residuos se recupera solo uno, lo que representa diez veces menos que la media nacional y convierte al estado en uno de los últimos lugares en reciclaje, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI).
Cada día se recolectan 4,330 toneladas de basura en la entidad, de las cuales se reciclan 2.6 toneladas diarias gracias a los 38 centros de acopio y a las cinco plantas de tratamiento. Esto significa que solo una milésima parte de la basura se logra reciclar.
Fuente: INEGI
Sin embargo, Raciel Flores Quijano, director de Química de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), aseguró durante una entrevista que el 40% de la basura que se genera en el estado es susceptible de reciclaje.
Desde el punto de vista del académico, el reciclaje generaría oportunidades de empleo, debido a que se podrían instalar industrias que transformen los materiales, pero también evitaría la saturación de los rellenos sanitarios, muchos de los cuales ya están rebasados.
De igual forma reciclar los residuos también ayudaría a salvar vidas, la Fundación Salva al Mar costea tratamientos para niños y niñas con insuficiencia renal o cáncer gracias a la recolección y posterior venta de materiales reciclables.
Se recicla poco en Puebla
Según Censo Nacional de Gobiernos Municipales y Delegacionales 2013, elaborado por el INEGI, Puebla está en lugar 17 nacional en cuanto a reciclaje de residuos a pesar de que es uno de los siete estados que más genera basura.

Foto: Agencia Enfoque
En la entidad solo uno de cada mil kilogramos de basura que se generan al día se recicla; mientras que el promedio nacional es de diez kilogramos por cada mil y en Nuevo León –el estado con mayor reciclaje- es de 70 kilos por cada mil.
Existen nueve entidades federativas en México que no reciclan basura de forma sistemática: Baja California, Campeche, Coahuila, Colima, Durango, Nayarit, Tabasco, Tamaulipas y Yucatán. En contraste los estados que más recolectan reciclables son: Nuevo León, Chihuahua, Guanajuato, Oaxaca y Jalisco.
De los 2,461 kilogramos -2.4 toneladas- de materiales reciclables que se recolectan en Puebla, dos terceras partes provienen de los 38 centros de acopio y una tercera parte de las cinco plantas de tratamiento de residuos que hay en el estado.
Los materiales que más de recuperan en Puebla son: el PET (politereftalato de etileno), el cartón y papel, plástico y vidrio.
El Diagnóstico básico para la gestión integral de los residuos 2012, del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC) y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), indica que en todo el país solo 13 estados se realizan actividades para la recolección selectiva, es decir, que no mezclan los materiales orgánicos con los inorgánicos y reciclables.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el reciclaje ayuda a:
El ahorro de materias primas, al reutilizar los materiales no se extraen más recursos naturales para su producción.
Ahorro de energía, se gasta menos energía en la extracción de recursos y es más fácil reciclar que hacer de la nada un producto.
Reducir la dependencia del petróleo, gran parte de la energía para extraer la materia prima viene los hidrocarburos.
Crear nuevos empleos.
Evitar la deforestación al reutilizar el papel.
Necesaria política pública
Raciel Flores explicó durante una entrevista con Poblanerías que del total de la basura que se genera en el estado 40% se podría reciclar, dicho porcentaje se lograría con una política pública adecuada y que a la larga traería tanto beneficios económicos como ecológicos.
Fuente: INEGI
Para que se recicle más en Puebla son necesarias más estaciones de transferencia de residuos, donde se separe buena parte de los materiales reutilizables antes de que se lleve la basura a los rellenos sanitarios.
Actualmente la entidad cuenta con ocho estaciones de transferencia ubicadas en igual número de municipios, según información del INEGI, pero en ninguna de ellas se compacta y selecciona la basura.
Para el investigador de la UPAEP, la construcción de estaciones de transferencia sería un detonante económico, ya que si se recolectara una cantidad importante de materiales se podrían instalar industrias para su transformación, como sucedió en Nuevo León, y que a su vez generen empleos.

Foto: Agencia Enfoque
Otro de los beneficios sería que los rellenos sanitarios no se saturen, pues el especialista considera que la mayoría están rebasados e incumplen con la normativa federal.
A la par de más estaciones de transferencia, Flores Quijano sugirió que se apliquen planes de manejo de residuos en los municipios que favorezcan la separación de la basura. Esto implicaría no solo que los ciudadanos separen los desechos orgánicos, inorgánicos y reciclables; sino que también los ayuntamientos adquieran nuevos contenedores de basura y camiones de recolección especiales.
Reciclar para ayudar
Si bien a la larga separar y reutilizar la basura detonaría la economía y mejoraría el medio ambiente, en el corto plazo asociaciones como Fundación Salva al Mar utilizan los recursos que obtienen del reciclaje para fines altruistas.
Para nosotros es una oportunidad de vida para los niños con insuficiencia renal y cáncer, porque estos residuos los vendemos y el recurso que sale es para apoyar a los pequeños que están en el Hospital del Niño Poblano”, dijo María Esther Ayón Jiménez, representante de la Fundación Salva al Mar.
Fundación Salva al Mar se creó hace ocho años cuando la hija de María Esther, Jimena, decidió emprender una campaña para evitar que la basura llegue al mar y afecte a los animales marinos. En sus primeros años la asociación recolectaba 200 a 500 kilogramos de reciclables al mes, ahora obtiene hasta diez toneladas gracias al apoyo de la UPAEP y la universidad Anáhuac.
Para María Esther Ayón otro de los objetivos de la fundación es que los habitantes se hagan responsables de sus desechos, esto a través de la separación de materiales, porque que esta forma será menos la basura que llegue a los rellenos sanitarios, a los ríos o mares del país.
POB/LFJ