Ya sea por represión a la manifestación de sus ideas políticas, víctimas de la violencia de las bandas del crimen organizado y su colusión con las autoridades, abusos de las policiales, o asesinadas por la violencia machista,
Todas estas circunstancias que se viven en México, de las que los jóvenes y estudiantes no son responsables, son las que los matan.
26 de septiembre de 2014 ocurrió el ataque a los estudiantes de la Escuela Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa, donde policías les dispararon cuando los jóvenes se encontraban viajando en unos autobuses, que habían “tomado” para viajar a la Ciudad de México, y asistir a la marcha de la conmemoración del 2 de Octubre.
De ahí en adelante quienes estudian en las escuelas normales rurales, y se manifestaron por la desaparición de sus compañeros, sufrieron una fuerte represión, en Tiripetío Michoacán y en Panotla, Tlaxcala.
El 3 de mayo de 2017 la estudiante de 22 años Lesvy Berlín Rivera, fue estrangulada por su novio con el cable del teléfono frente a la Torre de Rectoría, en la Ciudad Universitaria de la Universidad Nacional Autónoma de México.
El 23 de enero 2018 Marco Antonio un joven estudiante de la prepa 8 de la UNAM, fue detenido por la policía de la Ciudad de México, desapareció por 4 días y cuando fue encontrado se encontraba severamente golpeado y hasta el momento no ha recobrado el sentido.
El 19 de marzo de 2018 se reportó la desaparición de 3 estudiantes de la Universidad de Medios Audiovisuales de Jalisco, el 23 de abril la Fiscalía del estado de Jalisco dio a conocer que fueron asesinados por un grupo de criminales.
El pasado 3 de abril de 2018 cinco alumnos de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México fueron abordados por sujetos cuando se encontraban en la calle, fueron atacados a disparos y 3 de ellos murieron.
El 24 de abril de 2018 en la Preparatoria Federalizada número 1 de Ciudad Victoria, se registró un ataque con armas de fuego, hecho que dejó como saldo a cinco estudiantes heridos, tres hombres y dos mujeres.
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POB/PSC