Puebla es el cuarto estado del país donde los trabajadores perciben los salarios más bajos, afirman líderes sindicales locales, en el marco de la conmemoración del Día Internacional de los Trabajadores, en la capital del estado.
Las reformas laborales que se han presentado en México, han ocasionado que las percepciones tengan deterioros en la última década, generando que los empleados no obtengan sueldos que cubran las necesidades personales.
Mientras que la inflación en enero de 2018 se reportó en 5.5% –de acuerdo a cifras del INEGI– en el sector laboral únicamente fue de 2.23%, es decir una diferencia de 3.27 puntos porcentuales.
Durante la conmemoración del Día Internacional del Trabajo, en Puebla los representantes sindicales emitieron diferentes pronunciamientos, en las marchas de la ciudad; en los que solicitaron reconocimiento a sus derechos y respeto a la vida sindical.
Luis Escobar, integrante de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) consignó que las 12 reformas estructurales que prometieron el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) no han rendido los resultados que prometieron:
“Hoy el tiempo nos ha dado la razón nuevamente a los trabajadores, hoy el crecimiento del PIB de este país después de casi 12 reformas llamadas estructurales vuelve a seguir siendo el mismo”, señaló ante más de 10 mil trabajadores quienes se dieron cita en la avenida Juárez.

Casi 6 de cada 10 empleados, son informales
De acuerdo con los líderes sindicales, la informalidad es la fuente de empleo de casi 6 de cada 10 generadores de ingresos; provocando que más de 66% no cuente con seguridad social ni otras prestaciones que la Ley Federal del Trabajo garantizan en el país.
Agregó que el crecimiento que se pronostica para este 2018 es del 2.23% y 2.8 para 2019.
“La informalidad representa casi el 57 por ciento de este país, es decir que casi 6 de cada 10 trabajadores mexicanos están en la informalidad y de ellos prácticamente 2 de cada 3 no tienen acceso a la seguridad social hoy se han precarizado los salarios desde 2008 no hemos podido recuperar ese poder adquisitivo con la crisis inmobiliaria”, afirmó el representante de la UNT.
Impiden retroceso de 100 años
Las reformas a los artículos 107 y 123, que se aprobaron en febrero de 2017, esperan la aprobación del senado para entrar en vigor; no obstante, aún sigue pendiente. Las modificaciones pretenden alcances en los que se rompa el “corporativismo” sindical, que se transparenten estos organismos, la eliminación de “vicios” en las juntas de conciliación y arbitraje, la creación de un sistema de impartición de justicia y erradicar las prácticas de extorsión sindical y pagar para evitar una huelga, mismo que favorecerá a la parte patronal.
Los trabajadores llamaron a la unión a fin de evitar que, en la próxima sesión del senado, la ley sea aprobada, ya que consideraron se trata de un retroceso de 100 años para el sindicalismo.
“Hemos detenido un intento de retroceso de reforma laboral, el cual estuvo plagado de irregularidades y en el que pretendían que tuviéramos un retroceso de casi 100 años; acabar con la libertad sindical, en lo individual y colectivo, mediante la creación de un organismo que no responde a lo que en la constitución en el artículo 123 y en el 107 constitucional se plasmó el año pasado”, afirmó Luis Escobar Ramos.

Coinciden en mejoras
Tras pronunciar sus pliegos petitorios, los secretarios generales coincidieron en pedir respeto a sus derechos laborales, mejores salarios, libertad sindical y mejores oportunidades para las mujeres.
El líder del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Industria Automotriz Volkswagen (SITIAVW), Rey David García Avendaño señaló que “es ofensivo el estatus laboral que prevalece en el estado”.
“Los trabajadores de VW exigimos respeto a nuestros derechos (…) la atención de las autoridades para resolver los problemas que aquejan a los trabajadores (…) que las mujeres tengan más oportunidades de trabajo, que no se legalice el outsourcing y terminar con los topes salariales”, afirmó García Avendaño.
Marco Antonio Petlacalco, del sindicato de Telefonistas, se pronunció por la democratización del sector trabajador:
“Los telefonistas consideramos que solo mediante la libre asociación sindical de los trabajadores es posible democratizar el mundo del trabajo”.
Por último, indicaron que este 1 de julio los mexicanos deben evaluar su voto y de esta manera cambiar el rumbo del país, puesto que de ello depende su futuro y el de sus familias.
“Todas y cada una de las afrentas y como no las vamos a cobrar compañeros con la utilidad de nuestro voto Si queremos un cambio no nos equivoquemos el primero de julio compañeros”.
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POB/JCSD