Los integrantes del Partido Demócrata arrebataron la mayoría a los del Partido Republicano –del presidente Donald Trump –en la Cámara de Representantes. Sin embargo, los republicanos ampliaron su dominio en la Cámara de Senadores y conservaron las gubernaturas clave, según los resultados de la elección legislativa en Estados Unidos.
Los comicios reflejaron que los votantes universitarios, habitantes de los principales suburbios de la región, rechazaron las políticas propuestas por los republicanos en clara distancia con el presidente Donald Trump. En tanto, la clase obrera y la parte rural del país dieron un voto de confianza a sus agresivas declaraciones y posturas.
En la Cámara de Representantes, los demócratas obtuvieron 219 escaños, mientras que los republicanos solo 193. Al corte de esta edición, aún había 23 curules pendientes de resolución.
Los comicios legislativos también mostraron una nueva distribución del electorado en base a la raza, el género y la educación que podría reformular la política nacional de cara a los próximos años.
Los éxitos conservadores estuvieron impulsados por una coalición que es claramente más mayor, blanca, de mayoría masculina y con menos probabilidad de tener formación superior. Los demócratas recibieron el respaldo mayoritario de mujeres, personas de color, jóvenes y graduados universitarios.
Las mujeres batieron un récord al lograr al menos 85 escaños en la Cámara de Representantes, que contará con sus dos primeras diputadas musulmanas.
Además, Massachusetts eligió a su primera congresista afroestadounidense y Tennessee a su primera senadora.
REPERCUSIONES
La victoria de los candidatos del Partido Demócrata en la Cámara de Representantes tendrá repercusiones a nivel mundial, principalmente en materia económica, pues los legisladores tendrán la facultad de lanzar investigaciones sobre los negocios multinacionales del actual presidente Donald Trump.
De acuerdo con información de AP, las principales armas de los representantes electos son los citatorios judiciales para obligar a funcionarios, empresarios y otras figuras a entregar documentos y hacer declaraciones bajo juramento.
Entre los casos destaca la aprobación, en China, de 18 marcas vinculadas a Trump y a su hija Ivanka, bajo un presunto conflicto de intereses; además de la supuesta intromisión de Rusia en las elecciones presidenciales de 2016.
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POB/AAG