
Los políticos poblanos andan a la arrebatiña con la elección extraordinaria. No se ponen de acuerdo y el malestar y descontento crecen. No negocian, pretenden arrebatar. No hay punto de acuerdo, ni de criterios para definir a los candidatos que habrán de representar a partidos o coaliciones.
En Juntos Haremos Historia dan por hecho el triunfo de manera adelantada. Pero las corrientes que aspiran son irreconciliables: Luis Miguel Barbosa, Alejandro Armenta y Nancy de la Sierra, representan grupos que pelean siempre.
Peor aún, el centro también pelea: Yeidckol Polevnsky y Ricardo Monreal influyen impulsando candidatos distintos. La negociación con un tercero, se entorpece cuando representa la postura del belicoso José Juan Espinosa: Nancy de la Sierra.
La coalición Por Puebla al Frente no ata ni desata. En un proceso de extinción fast track por el aniquilamiento del Morenovallismo, el PAN está atomizado y el PRD y Movimiento Ciudadano buscan mejores opciones. Nadie aglutina.
El PRI está en agonía con 10 o más corrientes y sin liderazgo que convenza. Tiene cinco aspirantes y es poco probable que salgan unidos. Enrique Doger, Javier López Zavala, Ricardo Urzúa, Alberto Jiménez Merino y Lorenzo Rivera Sosa, llevan cada uno agua a su molino.
Ante un escenario político complicado surge la posibilidad de que una persona que no represente intereses locales y con compromiso político nacional logre conciliar y gobernar para Puebla y los poblanos y mantenga conciliación entre las fuerzas políticas locales.
Martha Tagle Martínez, poblana de cepa, con una carrera política que abarca desde sus años estudiantiles en la UNAM, diputada, senadora y en lucha permanente a favor de las mujeres, ha logrado introducir su nombre en las negociaciones entre los capos del centro del País.
Cuando una poblana, universitaria, de izquierda, veía las posibilidades de Morena me dijo: “ni a cuál irle”. Cuando escuchó la propuesta de la diputada Tagle Martínez en un convivio universitario sonrió y dijo: “ojalá los que deciden la tomen en cuenta”.
Ahí están, los tres personajes con más cancha, espacio, poder y trabajo.
¿A cuál irle? Usted tiene la palabra: Barbosa, Armenta o Tagle, no hay más.
Es cuánto.
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POB/LFJ