La donación de órganos es un acto beneficioso y altruista que salva la vida de algunos y mejora la calidad de vida de otros.

De acuerdo con la Secretaría de Salud, en México aún se necesita fomentar y propiciar una cultura de la donación, ya que no existen suficientes órganos para atender la gran demanda de habitantes que necesitan un órgano para trasplante.

La última estadística del Centro Nacional de Trasplantes (CENATRA) señala que, hasta abril de 2020, en el país había 23 mil 381 personas en lista de espera que requieren:

  • Riñón: 17 mil 383
  • Córnea: 5 mil 611
  • Hígado: 321
  • Corazón: 47
  • Riñón-Riñón: 10
  • Hígado-Riñón: 4
  • Pulmón: 3
  • Riñón-Páncreas: 2

La donación de órganos, de acuerdo a la Ley General de Salud, es el consentimiento de una persona para que, en vida o después de su muerte, cualquier órgano o tejido de su cuerpo sea utilizado para trasplantes.

Según el Centro Nacional de Trasplantes, con una donación de órganos pueden salvarse hasta 7 vidas.

Cómo ser donador de órganos en vida

Los requisitos para ser un donador, según CENATRA, son:

  • Ser mayor de 18 años
  • Ser compatible con el receptor, realizarse una evaluación médica, clínica y de salud mental, y no padecer o haber padecido enfermedades crónicas como diabetes, cáncer, hipertensión arterial, enfermedad renal o cardíaca.

Además, para ser un donador de órganos en vida se deberá otorgar un consentimiento ante el Notario Público, confirmando que ha recibido la información completa de parte de los médicos.

Estas donaciones y trasplantes de órganos generalmente son entre familiares. Sin embargo, no es necesario un parentesco familiar, sino cumplir con todos los requisitos y que exista una compatibilidad.

Cómo ser donador de órganos en caso de fallecimiento

La Ley General de Salud, que regula el proceso de donación y trasplantes, señala lo siguiente:

“Toda persona es disponente de su cuerpo y podrá ser donado total o parcialmente, para los fines previstos en el presente título”.

La donación depende de las características del fallecimiento. Llegando el momento, los médicos determinan cuáles son los órganos y tejidos aptos para el trasplante.
Si la muerte es producto de un paro cardiorrespiratorio, únicamente se podrán donar tejidos, y si se presenta muerte cerebral, se podrán donar tanto órganos como tejidos.

Existen tres maneras de convertirse en donador:

1. Hablando del tema de la donación de órganos con sus familiares y expresarles su decisión de ser donante al fallecer, pidiendo que la respeten, pues ellos tendrán que dar su consentimiento en el caso de su muerte.

2. Imprimiendo la tarjeta de donador de la página web del CENATRA. Esta se llena con el nombre y la firma de la persona donadora y de dos testigos. La tarjeta solo es informativa para los familiares, pero al final será decisión de ellos, pues no tienen la obligación de cumplir su deseo.

3. Llenando el “Formato Oficial Para Manifestar el Consentimiento Expreso de Donar Órganos Tejidos y Células Después de la Muerte”. El documento se encuentra también en la página del CENATRA y tiene más poder que la tarjeta, ya que no puede ser revocado por terceras personas.

Órganos y tejidos que pueden ser donados

De acuerdo a la Secretaría de Salud, los órganos y tejidos que se pueden donar, según el estado del donante, son:

En vida: Por paro cardiaco: Por muerte cerebral:
Un fragmento de pulmón Córneas Riñones
Sangre Piel Intestino
Médula ósea Huesos Tendones
Hueso Ligamentos Hígado
Células madre Tendones Córneas
Placenta Válvulas cardíacas Corazón
Riñón Vasos sanguíneos Piel
Un fragmento de hígado Cartílago Vasos Sanguíneos
Intestino Pulmones
Páncreas Ligamentos
Páncreas
Huesos

 

 

 


POB/LFJ