El Gobierno de la República llegó a un acuerdo con las familias de las 65 personas que trabajaban en la mina Pasta de Conchos, Coahuila (que quedaron atrapadas en febrero del 2006) para rescatar sus cuerpos, después de 14 años.

Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, informó que las familias otorgaron su consentimiento para que la Comisión Federal de Electricidad (CFE), una vez concluido el rescate, extraiga el carbón para su autoabastecimiento.

Se estima que el rescate tendrá un costo de 1,700 millones de pesos.

Además, durante la reunión que se tuvo con los familiares se llegaron a más acuerdos respecto al tema y en la minuta se puede leer lo siguiente:

  • Reparación integral, tanto individual como colectiva.
  • Se hará un pago de indemnización para el núcleo de las 65 familias, que se efectuará a través de la Secretaría de Gobernación, a más tardar el 31 de diciembre del año presente.
  • En homenaje a las víctimas se va a crear un Memorial a cargo de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano en una parte del predio de la mina Pasta de Conchos.

También se acordó que el presidente López Obrador asista a Nueva Rosita, Coahuila, el 23 de octubre, a supervisar los avances de los puntos señalados anteriormente.

¿Qué pasó en la mina Pasta de Conchos?

El 19 de febrero del 2006 a las 2:30 horas (aproximadamente) hubo una explosión, lo que ocasionó un colapso de varios túneles en la mina de carbón Pasta de Conchos, en la región Nueva Rosita, Coahuila. En dicho colapso quedaron atrapados 65 mineros, quienes cumplían el turno de las 22:00-6:00 horas.

En su momento, el Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros y Metalúrgicos informó que los mineros se encontraban atrapados a 490 metros aproximadamente, dentro del túnel de 1.6 km de largo. Y, por su parte, Grupo México, quien operaba la mina en ese entonces, declaró que los mineros se encontraban a unos 150 metros bajo tierra.

Se hizo el intento de rescate por menos de 20 días y el 25 de febrero, Grupo México declaró en rueda de prensa que era imposible que alguien hubiera sobrevivido tras la explosión de metano.

El 23 de junio de 2006 se encontró el cuerpo del minero Felipe de Jesús Torres Reyna y el 1 de enero del 2007 localizaron un segundo cuerpo, que fue identificado como José Manuel Peña Saucedo; actualmente, se encuentran 63 cuerpos a la espera de ser recuperados.

 

 

 

 


POB/LFJ