Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, aseguró tener pruebas que las acusaciones contra Mario Marín, en el caso de tortura contra Lydia Cacho, no avanzaron en su momento debido a un contubernio con Felipe Calderón.
En conferencia de prensa, el presidente señaló que Mario Marín “le ayudó en el fraude a Calderón” y que por eso, pese a que en la campaña visitó Puebla para denunciar los hechos, al momento de gobernar, no actuó.
“No se avanzó en la investigación en ese entonces porque Marín le ayudó en el fraude a Calderón, así como lo están escuchando, como otros gobernadores, le ayudaron a Calderón en el fraude”.
Según el presidente hay pruebas de eso y aseguró que su gobierno se “defiende a las víctimas”
“Cuando viene la elección y le ayudan, se calla y no se actúa. Nosotros siempre hemos estado defendiendo a quienes son víctimas de autoritarismo y violación de derechos humanos y no se nos olvida”.
Estas declaraciones surgen luego que se le preguntara por un amparo que, al parecer, el ex gobernador, está promoviendo para salir de la cárcel en Cancún.
El mandatario respondió que no tenía información del proceso, sin embargo, recalcó que se investigará y no habrá impunidad en su gobierno, pues actualmente “no se protege a los delincuentes”.
“Si la Fiscalía tiene que ver, el poder judicial, decirle a Lydia Cacho con todo respeto, que no somos iguales, nosotros no protegemos delincuentes, tenemos autoridad moral”, aseguró el presidente.
Mario Marín fue detenido en febrero de 2021 en Acapulco, Guerrero y trasladado a Quintana Roo, donde lo requerían las autoridades judiciales. Desde entonces ha permanecido recluido en el penal.
Sobre el caso, Miguel Barbosa Huerta, gobernador de Puebla, mencionó que el caso de amparo de Mario Marín debe ser resuelto por los jueces, y que, si llegara a salir de la cárcel, los poblanos no deben consentir el pasado y otorgar privilegios.
Antecedente Mario Marín y el Caso Lydia Cacho
El caso de Lydia Cacho comenzó en 2005 cuando la periodista publicó su libro “Los demonios del Edén” donde apuntó que políticos y empresarios estaban involucrados en una red de trata de menores.
Tras la publicación, Kamel Nacif demandó a la periodista por los delitos de difamación y calumnia. Por ello, fue detenida en Cancún, y trasladada a Puebla por órdenes del ex gobernador de Puebla.
Meses después, en febrero de 2006, se conoció una grabación entre Marín y Nacif, donde se tuvo registro de que hubo actos de violencia, de tortura y de abuso de autoridad hacia la periodista.
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Así, Lydia Cacho comenzó la batalla jurídica en contra del ex gobernador por tortura. En 2018 recibió el apoyo del Comité de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que emitió una resolución en contra del Estado Mexicano por el caso.
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POB/AHC
