Nota del editor: Elena Larrea murió el 19 de marzo de 2024 a causa de una trombosis pulmonar, en paz descanse.

En Atlixco, Puebla, los caballos maltratados han recibido una segunda oportunidad, aunque algunos han llegado sin haber recibido siquiera la primera. Se trata de Cuacolandia, un oasis de esperanza para caballos fundado por Elena Larrea.

En entrevista con Poblanerías.com, Elena Larrea habla de Cuacolandia, considerado el primer santuario de rescate para caballos maltratados en México y que es, hasta ahora, único en todo el continente.

Para Elena Larrea, los caballos eran más que animales. En México, como en muchas partes del planeta, los equinos son considerados herramientas de carga y no se les ve como seres sintientes merecedores de respeto y bienestar.

Por esa razón, Elena inició un proyecto que consistiría en el rescate y la concientización del maltrato animal.

Su experiencia personal como jinete, que inició desde que era una niña, la guió a tener una conexión profunda y empática con estos animales, lo que eventualmente la llevó a fundar el santuario.

Cuando montaba era una jinete y a los 14 años fui campeón nacional y pues, simplemente llegó un punto que quise regresarle a los caballos algo de lo mucho que me habían dado y por eso fundé Cuacolandia.

Cuacolandia inició formalmente en 2019, cuando Elena Larrea decidió que su caballo de equitación –llamado Divo– no debía estar sometido. Decidió dejar que corriera en una pista, libre, sin ataduras y al ver la reacción del animal, se propuso cambiar sus condiciones de vida.

Elena Larrea, fundadora de Cuacolandia
(Foto: La Resistencia)

El arranque de Cuacolandia también conllevó concientizar en los jinetes que los caballos no deben estar la mayoría del tiempo amarrados; sin poder correr, socializar con más animales y estar únicamente a disposición del humano.

Entre los primeros rescates de Cuacolandia está el caso de los caballos carretoneros del Estado de México que jalaban basura.

Empecé a trabajar en el Estado de México con los caballos de carretoneros, esos que jalan basura, y empiezo, pues a a ir por los caballos que definitivamente más ayuda necesitan

A través de sus esfuerzos, Elena Larrea busca se cambie esa normalización del maltrato equino, trabajando para cambiar la percepción pública y fomentar un entendimiento más compasivo hacia estos animales.

Elena Larrea, fundadora de Cuacolandia
(Foto: La Resistencia)

Uno de los retos a los que Elena Larrea suele enfrentarse es combatir la visión tradicionalista que justifica el uso de los caballos para trabajos pesados y deportes sin considerar su bienestar.

Los caballos son seres sintientes están aquí con nosotros no para nosotros; que nos pueden asistir, o sea, tanto como algún tipo de transporte o puedes hacer alguna disciplina ecuestre sin tenerlo esclavizado

Por eso, quiere expandir el trabajo a través de cápsulas educativas dirigidas tanto a profesionales del deporte ecuestre como al público general, para promover prácticas más éticas en el trato a los equinos.

Cuacolandia y el financiamiento a través de Only Fans

El financiamiento de Cuacolandia proviene de una fuente poco convencional: la plataforma de contenido digital OnlyFans. Elena Larrea, utilizando su influencia y recursos generados a través de esa página, ha logrado sostener y expandir este proyecto.

Elena Larrea, fundadora de Cuacolandia
(Foto: La Resistencia)

Con las ganancias de OnlyFans, Elena ha podido reunir el dinero necesario para el cuidado digno de más de 50 caballos que actualmente viven en el santuario.

La historia de Cuacolandia y su fundadora es un testimonio de cómo la pasión y dedicación pueden generar un cambio positivo en la sociedad.

Elena Larrea y su equipo han logrado construir un santuario que no solo ofrece un hogar seguro para los caballos rescatados sino que también desafía las percepciones y prácticas culturales arraigadas que perpetúan el maltrato animal.

Elena Larrea, fundadora de Cuacolandia
(Foto: La Resistencia)

Mila y la zoofilia como delito

Elena Larrea aboga por cambios legislativos que reconozcan y sancionen la crueldad animal como un delito grave en México. Su trabajo ha sentado precedentes legales importantes, como en el caso de la potranca Mila, demostrando el impacto que puede tener la perseverancia y el compromiso con el bienestar animal.

Mila es el primer caballo en México que mandó a su agresor a una vinculación a proceso.

Cuacolandia no solo es un refugio para caballos; es un movimiento que busca transformar la manera en que las personas ven y tratan a los equinos.

Hasta la fecha, Cuacolandia ha brindado refugio y cuidado a más de 300 caballos que han sido víctimas de severos maltratos y negligencia. Esta iniciativa no solo ofrece a estos equinos un espacio seguro donde recuperarse física y emocionalmente, sino que también les garantiza una jubilación digna, libre del trabajo y la explotación a los que muchos fueron sometidos.

Escucha la entrevista con Elena Larrea


Entrevista: Lizeth Flores Jácome
Asistencia de producción: Daniela Jiménez y Mauricio Meléndez
Fotografías: Juan Carlos Sánchez / La Resistencia

 

 

 


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