El cáncer de próstata es uno de los principales problemas de salud para los hombres y, debido a su carácter asintomático en las primeras etapas, es común que muchos casos se detecten ya en estados avanzados.
En entrevista con poblanerias.com especialista en urología, el Dr. Jairo Rodríguez explica la importancia de la detección temprana, los avances en tratamientos y las señales de alerta para la salud prostática, ofreciendo recomendaciones para mantener una buena calidad de vida.
¿Por qué es clave la detección temprana del cáncer de próstata?
El médico subraya que el cáncer de próstata es una enfermedad de desarrollo lento y que generalmente no presenta síntomas claros en sus primeras fases. Esto hace que, cuando un paciente finalmente presenta molestias, el cáncer ya esté avanzado.
“Desafortunadamente, el cáncer de próstata no es muy sintomático, y algunas veces cuando se encuentra el paciente ya con síntomas, quiere decir que ya está avanzado”, señala el especialista.
Para detectar oportunamente esta enfermedad, se recomienda que los hombres realicen un chequeo anual a partir de los 45 años. Este examen consiste en un examen dígito rectal (EDR) y una prueba de antígeno prostático específico (PSA), dos herramientas que, combinadas, pueden detectar signos sospechosos de cáncer.
“Juntos [el examen dígito rectal y la prueba de PSA] tienen una especificidad de una sensibilidad por arriba del 87% para nosotros sospechar si el paciente puede estar presentando datos sospechosos”, detalla el médico.
En caso de resultados anormales, se recomienda hacer una biopsia para confirmar el diagnóstico. Para aquellos hombres con antecedentes familiares de cáncer de próstata, el especialista aconseja comenzar los chequeos desde los 40 años.
Avances recientes en el tratamiento del cáncer de próstata
En los últimos años, la medicina ha avanzado en la búsqueda de tratamientos que no solo combatan eficazmente el cáncer, sino que también minimicen los efectos secundarios para mejorar la calidad de vida de los pacientes.
“Todos los años, y en diferentes estudios clínicos, se hacen múltiples investigaciones para tratamientos médicos de radioterapia y quimioterapia”, menciona el urólogo, explicando que el objetivo es brindar “una mejor alternativa al paciente, tanto en su posibilidad de curación o de control, y también de los efectos colaterales.”
Estos avances incluyen nuevos medicamentos, cirugías menos invasivas y terapias más personalizadas que permiten un tratamiento adaptado a las necesidades específicas de cada paciente. Entre las opciones menos invasivas, destacan procedimientos como la cirugía laparoscópica, que tiene menor impacto en la calidad de vida y un tiempo de recuperación más corto.
Cuidado de la Salud Prostática: ¿Cuándo y cómo hacer revisiones?
El especialista recomienda que los hombres a partir de los 45 años incluyan en su rutina de salud revisiones urológicas regulares, ya que, con la edad, es común el desarrollo de patologías prostáticas.
“La mayoría de los pacientes por arriba de 45 o 50 años de edad acuden a revisión con el urólogo por presentar crecimiento prostático, problemas de cáncer o por el examen urológico”, comenta el doctor.
El crecimiento benigno de la próstata, conocido como hiperplasia prostática benigna (HPB), es común en hombres mayores y puede causar síntomas similares a los del cáncer. Aunque el crecimiento de la próstata está determinado genéticamente, el especialista destaca la importancia de monitorear los cambios, ya que la HPB no es necesariamente un indicador de cáncer.
“Nos empieza a crecer la próstata. No tiene ningún factor predisponente. El crecimiento prostático está completamente programado genéticamente”.
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Señales para detectar problemas prostáticos
Los hombres deben prestar atención a ciertas señales que podrían indicar un problema prostático. Algunos de los síntomas comunes incluyen:
- Frecuencia urinaria, sobre todo por la noche: “Los pacientes se levantan tres o cinco veces para ir al baño”, explica el especialista.
- Flujo de orina débil y sensación de no vaciar completamente la vejiga.
- Esfuerzo al orinar y en algunos casos, ardor o dolor.
Aunque estos síntomas son comunes en condiciones benignas como la HPB o la prostatitis, también pueden ser señales de alerta en casos avanzados de cáncer.
“El sitio más frecuente donde metastatiza el cáncer es a los huesos. Algunos pacientes presentan dolores en la pelvis o en la columna vertebral, tipo osteoarticular”, indica el médico.
Estos síntomas, al ser más graves, pueden aparecer en fases avanzadas de la enfermedad, lo que recalca la importancia de las revisiones tempranas y constantes.
¿Qué sigue después de una operación o tratamiento prostático?
Para aquellos pacientes que han sido tratados por cáncer de próstata, el seguimiento post-tratamiento es fundamental. Esto incluye controles periódicos de PSA y exámenes urológicos para vigilar cualquier posible recurrencia de la enfermedad.
“Al paciente se le vigila en este caso con su antígeno prostático y con un monitoreo constante”, detalla el urólogo.
La calidad de vida de los pacientes que han recibido tratamiento quirúrgico o médico puede mantenerse alta. Muchos hombres logran una supervivencia prolongada con la enfermedad controlada, pudiendo vivir hasta 15 años o más con una buena calidad de vida.
El Dr. también resalta el papel de la alimentación en la salud prostática. Existen estudios que sugieren que una dieta alta en grasas podría estar asociada a estados más agresivos de cáncer de próstata.
“Algunos artículos dicen que las dietas altas en grasas no ayudan y que alimentos ricos en licopeno ayudan a la quimio-prevención”, explicó.
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