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Desde los ocho años, Claudia Cid encontró en el fútbol un espacio para crecer y competir.

Su incursión en el deporte comenzó en un entorno dominado por hombres, donde, lejos de enfrentarse a barreras, recibió respeto y exigencia.

Ese inicio marcó el ritmo de una carrera en la que, paso a paso, ha consolidado su lugar en la Liga MX Femenil. Su historia, como ella misma explica, es el resultado de oportunidades bien aprovechadas, de aprendizajes constantes y de un compromiso inquebrantable.

Claudia Cid posando con mirada firme y los brazos cruzados, representando su liderazgo en el fútbol profesional.
(Foto: La Resistencia)

Claudia recuerda con especial gratitud la aparición de la Liga MX Femenil, un detonante para su profesionalización en un deporte que la apasiona profundamente.

“Sabía que era una oportunidad única”, comenta.

Con esa certeza, su camino en el fútbol tomó forma a través de equipos como Lobos BUAP, América, León y Cruz Azul, cada uno dejando huellas significativas en su desarrollo personal y profesional.

Claudia Cid señalando hacia adelante, simbolizando su enfoque en el futuro y las metas en su carrera deportiva.
(Foto: La Resistencia)

Lobos BUAP: el aprendizaje del trabajo en equipo

En Lobos BUAP, Claudia descubrió una dimensión fundamental del fútbol: el sentido de familia. Para ella, este equipo representó más que una experiencia deportiva; fue un espacio donde aprendió a valorar la armonía y el entendimiento dentro del vestidor.


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“El equipo era familia, y eso se traducía en la cancha”, señala.

Su paso por Lobos no solo fortaleció su juego, sino que también marcó un punto clave en su visión del deporte como una combinación de técnica, esfuerzo y valores compartidos.

Retrato en primer plano de Claudia Cid, mostrando una expresión seria y determinada, reflejo de su personalidad en el campo.
(Foto: La Resistencia)

La fortaleza mental de Claudia Cid en el América

Llegar al América implicó enfrentarse a retos inéditos. La dinámica de jerarquías en el vestidor y la falta de minutos en el campo pusieron a prueba su capacidad para mantenerse firme y enfocada.

Claudia reconoce que esta etapa, aunque complicada, fue esencial para fortalecer su mentalidad y aprender a gestionar las emociones.

“Entendí la importancia de trabajar más y de mantenerme positiva incluso cuando las cosas no salían como esperaba”, explica.

Su decisión de salir del equipo para unirse a León marcó el inicio de un nuevo capítulo.

Claudia Cid con un balón en el hombro, destacando su vínculo con el fútbol y su trayectoria en la Liga MX Femenil.
(Foto: La Resistencia)

León: consolidación y liderazgo

En León, Claudia no solo recuperó minutos en el campo, sino que también asumió roles de liderazgo.

La capitanía, aunque desafiante, le permitió crecer como persona y como jugadora. En este equipo, encontró nuevamente el sentido de comunidad y respaldo que había valorado en Lobos.

Claudia describe esta etapa como una reafirmación de su potencial, destacando la colaboración con compañeras clave y su capacidad para desempeñarse con seguridad en cada partido.

Claudia Cid con una iluminación en tonos rojos y azules, portando un balón y mirando al horizonte, representando su identidad como jugadora.
(Foto: La Resistencia)

Aprendizajes de Claudia Cid en Cruz Azul y nuevos retos en Tijuana

El paso por Cruz Azul trajo consigo lecciones valiosas sobre el rol de una jugadora dentro del equipo. Claudia entendió que, más allá de estar en la cancha, cada integrante tiene una función importante que contribuye al colectivo.

Su experiencia con la afición y la conexión que logró con el club son recuerdos que atesora mientras avanza en su carrera.

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Ahora, en Tijuana, sus metas son claras: calificar a la liguilla y apoyar a las jugadoras más jóvenes, compartiendo la experiencia acumulada a lo largo de los años.

Claudia Cid sosteniendo un balón, iluminada con tonos rojos y azules, evocando su presencia en el fútbol profesional.
(Foto: La Resistencia)

El avance de la Liga MX Femenil

Claudia observa con satisfacción el crecimiento de la Liga MX Femenil desde sus inicios hasta hoy. Para ella, este desarrollo no se limita a los aspectos económicos o publicitarios, sino que se refleja en la calidad del fútbol que se juega en la actualidad.

La permanencia en una competencia tan exigente, afirma, es un logro que valora profundamente, así como la oportunidad de seguir contribuyendo al deporte que la vio crecer.

Claudia Cid con un balón bajo el brazo, posando de perfil en una iluminación roja intensa, representando determinación y fuerza.
(Foto: La Resistencia)

Inspiración para las nuevas generaciones

Como poblana, Claudia tiene un mensaje claro para quienes sueñan con una carrera en el fútbol: establecer metas claras y trabajar por ellas con determinación.

Reconoce que el camino puede ser arduo, pero asegura que las recompensas hacen que todo esfuerzo valga la pena.

También enfatiza las distintas vías para destacar, ya sea en el ámbito profesional o universitario, y motiva a las niñas y jóvenes a no abandonar sus sueños.

Claudia Cid de frente, con los brazos cruzados e iluminación roja, proyectando seguridad y liderazgo como defensa en el fútbol mexicano.
(Foto: La Resistencia)

Un futuro ligado al deporte

Claudia visualiza su futuro en el fútbol desde una nueva perspectiva. Actualmente, estudia para convertirse en entrenadora física profesional, una carrera que le permitirá seguir ligada al deporte que define su vida.

“Quiero seguir contribuyendo al fútbol desde otro rol, ayudando a otros a alcanzar su mejor versión”, comenta.

Con su trayectoria como jugadora y su pasión por la preparación física, Claudia se asegura de que su presencia en el deporte continuará siendo relevante en los años venideros.

 

 


POB/JCSD

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