Iglesias barrocas en Puebla: cuáles visitar

Las iglesias barrocas en Puebla guardan historia y cultura, por lo que son un sitio ideal para creyentes, pero también por quienes disfrutan de la arquitectura de estos sitios.

(Foto: Es Imagen)
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La entidad poblana se ha convertido en un destino de turismo religioso, pues destaca la riqueza histórica y cultural de las iglesias barrocas en Puebla, buscadas por los creyentes, pero también por quienes disfrutan de la arquitectura de estos sitios.

De acuerdo al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el arte y la pintura barroca se caracteriza por ser emotiva, en su mayoría las temáticas giran en torno a la vida de la Virgen María, de Jesús y de los santos, como modelos de vida a seguir.

La Compañía, Templo Expiatorio del Espíritu Santo

Una de las iglesias barrocas en Puebla es el templo del Espíritu Santo, mejor conocido como “La Compañía” fue creado por la orden jesuita, bajo la advocación del Espíritu Santo.

Los jesuitas llegaron a Puebla en 1572, quienes recibieron una donación por parte del capitán Melchor de Covarrubias para construir este templo. Es por eso, que el capitán recibió el título de fundador del Templo y de los Colegios del Espíritu Santo.

Las obras de edificación de la iglesia definitiva iniciaron en 1746 a cargo del maestro arquitecto José Miguel de Santa María, considerado como el “verdadero maestro de la arquitectura barroca poblana”.

La Compania
(Foto: Juan Carlos Sánchez Díaz/La Resistencia

Fue empezada a construir en 1583 y terminada 17 años más tarde, en 1600. Actualmente, el templo se compone de tres naves y un pórtico. Sobre las puertas se lee la MAR (María) IHS (Jesús) Joseph (José) y en la fachada se encuentra el escudo de la Compañía del Santísimo nombre de Jesús.


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Templo de San Francisco

Otra de las iglesias barrocas en Puebla es el templo de San Francisco es el primer convento que se estableció en Puebla, donde se venera el cuerpo del Fray Sebastián de Aparicio. Está ubicado entre el Bulevar 5 de Mayo y la Avenida 14 Oriente.

La misa de la fundación fue realizada por el Fray Toribio de Benavente, el 16 de abril de 1531. Además, su fachada destaca por su estilo barroco.

Iglesia de San Francisco
(Foto: Es Imagen)

Su construcción concluyó en 1585 y en los muros se conservan tres lienzos de tema franciscano, que representan “Los frutos de la religión seráfica”, los primeros doce franciscanos que llegaron a Nueva España y el “martirio de 19 frailes”.

Iglesia de San Francisco Acatepec

San Francisco Acatepec, ubicada en San Andrés Cholula, data del siglo XVI y es una edificación franciscana; su construcción inició en 1560 y la fachada se culminó en 1760.

Esta, que destaca entre iglesias barrocas en Puebla, tiene una planta de cruz latina conformada por siete cuerpos y con una bóveda de cañón corrida.

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(Foto: Archivo/Agencia Enfoque)

En el interior de la Iglesia la decoración capta la atención del espectador por la densidad y brillantez de las formas; sin embargo los retablos -de estilo barroco- que existían en el interior del templo se perdieron en el incendio de diciembre de 1939.

Iglesia del Carmen

El templo dedicado a la Virgen del Carmen, ubicado en la calle 16 de Septiembre y 17 oriente en Puebla, data del siglo XVI y es considerado Patrimonio Histórico de la ciudad debido a que cuenta con grandes obras de arte en su interior y en la fachada.

El templo tiene la arquitectura barroca de principios del siglo XVII, dos de sus capillas son de notable factura y decoración.

En la fachada, de una de las iglesias barrocas en Puebla más conocida, del templo se puede observar un mosaico de Talavera en el que se encuentra representada la anterior patrona del templo Nuestra Señora de los Remedios.

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(Foto: Archivo/Agencia Enfoque)

En la parte superior hay dos relieves del escudo de la orden, formado por un monte rematado en cruz, también se aprecian tres estrellas que representan las virtudes teologales, la esperanza, la fe y la caridad. En la parte superior hay una corona y un brazo empuñando una espada.

Templo de Analco

Este templo, ubicado en el tradicional barrio de Analco, no solo es un espacio religioso, sino también un testimonio vivo de la historia y evolución de la ciudad.

Sus orígenes se remontan a 1560, cuando en el lugar existió una pequeña ermita dedicada a las ánimas. Más tarde, en 1618, se construyó el templo bajo la advocación del Santo Ángel Custodio, y en 1927 fue erigida como parroquia por el obispo Bernardo Gutiérrez de Quiroz. Este cambio marcó un hito importante, al desvincularla de la parroquia de San Francisco y otorgarle una identidad propia.

Templo de Analco

El templo ha sido enriquecido con el paso de los siglos. En 1767 se añadió la capilla del lado del evangelio, y en 1778 la del lado de la epístola. El bautisterio fue concluido en 1770, aportando al conjunto arquitectónico una estética que mezcla tradiciones indígenas y elementos coloniales. La parroquia pasó a manos del clero secular en 1640, siendo el presbítero Fernando Díaz de Talavera su primer párroco.

El fervor religioso se refleja en las imágenes veneradas en el interior del templo, entre las que destacan San Miguel, San Gabriel, San Rafael y el Santo Ángel Custodio. Además, los fieles rinden homenaje al Señor de las Tres Caídas, a Jesús Nazareno en su Santo Entierro y a diversas advocaciones marianas, como Nuestra Señora de la Soledad y la Virgen de Tzocuilan. Estas devociones han consolidado a la parroquia como un espacio central en la vida espiritual de Puebla.

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POB/KPM

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