Con su inclusión en el programa olímpico de Los Ángeles 2028, el flag football no solo gana visibilidad internacional, sino que consolida su papel como herramienta de empoderamiento femenino; así lo expresan dos figuras destacadas en la historia de este deporte en México, Diana Flores y Sandra Romero.
Una deporte para romper estereotipos: Diana Flores
En entrevista para Poblanerias.com, Diana Flores, actual capitana de la Selección mexicana de flag football y embajadora global de la NFL, explicó que el flag football ha sido una herramienta de empoderamiento y para romper estereotipos sobre el papel de las mujeres en el deporte.
“Creo que el flag football le ha dado una herramienta de empoderamiento impresionante a las niñas y mujeres en nuestro país y en todo el mundo”, afirmó.
Desde su perspectiva, asevera que el flag football ha derribado estereotipos de género y barreras culturales, permitiendo que mujeres encuentren un espacio de crecimiento, como lo ha sido para ella misma.
“Empecé siendo una niña a la que le dijeron que no una y mil veces que no podía jugar este deporte porque era para niños”, dijo.
Sin embargo, su trayectoria ha demostrado lo contrario.
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Además de ser una de las atletas más reconocidas a nivel internacional, Diana ha asumido el cargo como presidenta del Comité de Atletas de la Federación Internacional de Fútbol Americano (IFAF).
“Desde esta posición buscamos impulsar el desarrollo del deporte femenino y del flag football”, señaló, destacando su participación en el proceso que logró que el deporte fuera reconocido por el Comité Olímpico Internacional para los Juegos Olímpicos de 2028.
El legado de una pionera: Sandra Romero
El camino que hoy recorre Diana Flores fue abierto por mujeres como Sandra Romero, exjugadora y referente histórica del flag football en México. Con más de 40 años de trayectoria y 11 mundiales disputados, Romero ha sido testigo y protagonista del desarrollo del deporte desde sus inicios.
“Este deporte me representa: ser disciplinada, constante, perseverante, y nunca derrotarse ante nada”, comentó Romero, en entrevista para Poblanerias.com, quien comenzó su carrera en la universidad tras ver una invitación pegada en los muros del campus.
Desde entonces, Sandra, también conocida como “La Payton”. no ha dejado de jugar ni de compartir su experiencia como entrenadora.
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“Nos costó a nosotras, ahora sí que casi picar piedra, para que ahora el flag football sea olímpico”, explicó sobre la reciente inclusión del deporte en los Juegos Olímpicos de 2028.
Aunado a lo anterior, pese a que lamenta no haber tenido la oportunidad de vivir esa etapa como atleta, celebra que las nuevas generaciones aprovechen esta oportunidad y las invita a que “nunca dejen de entrenar”.
Inspirar a nuevas generaciones, coinciden ambas
Ambas reiteran en que el flag football ofrece algo más que competencias, pues consideran que es una herramienta de autoconocimiento, comunidad y superación.
“Date la oportunidad de conocerte. Este es un deporte que nos da oportunidades para alcanzar nuestros sueños dentro y fuera de la cancha”, aconseja Diana.
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Sandra, por su parte, invita a las niñas a no rendirse: “Que practiquen este deporte o cualquier otro que deseen, y que nunca digan ‘no puedo’, porque sí se puede”.
Por ello, desde su rol como entrenadora, busca transmitir la pasión y valores que han definido su carrera
La inclusión de flag football como deporte olímpico
En octubre de 2023, el Comité Olímpico Internacional (COI) confirmó que el flag football formará parte del programa olímpico en Los Ángeles 2028, junto a otras disciplinas como críquet, lacrosse y squash.
En ese sentido, Diana Flores celebró la decisión como un triunfo colectivo:
“Primero me llenó de alegría el corazón ver toda la gente que tuvo que verse involucrada para que esto fuera realidad”.
Este deporte, derivado del fútbol americano, se juega sin contacto físico y con cinco jugadores por equipo. Para detener al oponente, se deben quitar las banderas que lleva en la cintura. Su formato accesible e inclusivo ha sido clave para su expansión.
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POB/KPM