El gobierno del estado de Puebla emitió una recomendación dirigida a artistas, representantes y organizadores de eventos de la Feria de Puebla 2025, para que no se interpreten narcocorridos durante las presentaciones en el Palenque y el Teatro del Pueblo.
La recomendación fue anunciada por el secretario de Gobernación de Puebla, Samuel Aguilar Pala, quien explicó que se trata de un exhorto formulado por el gobierno estatal y respaldado por la presidenta Claudia Sheinbaum, como parte de una política nacional para promover contenidos artísticos libres de apología a la violencia.
Aunque en Puebla no existen sanciones formales, la medida busca prevenir incidentes durante la Feria 2025, similar a lo ocurrido en Texcoco días antes.
La decisión se dio a conocer después del incidente registrado en la Feria del Caballo 2025, en Texcoco, Estado de México, donde el cantante Luis R. Conriquez fue agredido por asistentes luego de anunciar que no interpretaría narcocorridos, acatando una recomendación del gobierno mexiquense. El artista declaró que se ajustó a la normativa estatal que prohíbe expresiones musicales que hagan apología del delito.
El evento derivó en disturbios, daños materiales y la evacuación del recinto, según informaron medios y autoridades locales.
¿Qué dice el Código Penal de Puebla sobre los narcocorridos?
En Puebla, actualmente no existe una legislación específica que prohíba la interpretación de narcocorridos. Sin embargo, el artículo 229 del Código Penal estatal establece que se impondrá sanción a quien “haga apología de un delito o de quienes lo cometan”, siempre que esta sea pública.
El texto íntegro del artículo 229 señala:
“El que públicamente provoque a cometer un delito o haga apología de éste, o de algún vicio, o de quienes lo cometan, será sancionado con prisión de quince días a seis meses y multa de tres a treinta Unidades de Medida y Actualización, si el delito no se ejecutare. En caso contrario, se impondrá al provocador la sanción que le corresponda por su participación en el delito cometido.”
La apología del delito no requiere que se consuma el acto delictivo. Basta con que se promueva, justifique o glorifique públicamente el crimen o a quienes lo cometen.
Según el código, se sanciona a quien haga apología pública de un delito o de quienes lo cometan con una pena de quince días a seis meses de prisión y una multa de tres a treinta Unidades de Medida y Actualización (UMA), en caso de que el delito no se llegue a ejecutar.
No obstante, si como resultado de esa apología el delito se comete, entonces al provocador se le impondrá la sanción correspondiente por su participación en dicho delito.

Los narcocorridos —un subgénero musical que narra las acciones de personajes vinculados con el narcotráfico— podrían, en determinados casos, ser interpretados como apología del delito si cumplen con los elementos mencionados en el artículo.
No obstante, esta interpretación debe analizarse caso por caso, y en concordancia con las garantías constitucionales a la libertad de expresión.
En Puebla, la presentación del cantante Gerardo Ortiz, anunciada inicialmente para el Palenque de la Feria, fue cancelada.
La decisión se tomó tras conocerse que el artista se declaró culpable ante autoridades de Estados Unidos de haber ofrecido conciertos organizados por promotores vinculados al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el cantante colaboró con el FBI como parte de un acuerdo judicial.
Estados donde ya se prohíben los narcocorridos
De acuerdo con el artículo 6º de la Constitución mexicana y el artículo 13 del Pacto de San José, la libertad de expresión, incluida la artística, está protegida. Sin embargo, en casos como la apología del delito, puede haber restricciones si se demuestra que el contenido exalta, justifica o normaliza conductas delictivas de manera pública y con impacto social.
En este contexto, las autoridades deben justificar legalmente que se cumple con los elementos tipificados, y al mismo tiempo no vulnerar derechos constitucionales.

La postura del gobierno de Puebla se suma a la de otras entidades que han restringido o prohibido los narcocorridos. Entre ellos se encuentran Baja California, Jalisco, Chihuahua, Estado de México, Nayarit, Guanajuato y Quintana Roo. En varios de estos casos, se han aplicado sanciones administrativas, cancelación de conciertos y multas económicas.
En contraste, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, señaló recientemente que no existe una prohibición federal contra los narcocorridos. Sin embargo, su administración impulsa contenidos musicales libres de violencia, como parte del concurso binacional “México Canta”.
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POB/LFJ