El estado de nuestro vecino del norte, California, ha decidido legalizar la marihuana. El pasado martes 8 de noviembre, se realizó la votación para la legalización del uso recreativo del cannabis.
Situación que genera múltiples cambios para México, las consecuencias que este acontecimiento tendrá para el país aún son difíciles de medir con cifras. Sin embargo, los expertos han comenzado a sacar sus conclusiones.
Además de California, ya son siete estados más y Washington, D.C. los que han decidido regular el consumo de este producto. La legalización es una respuesta de los estados a la gran demanda que la marihuana tiene entre sus ciudadanos, lo que sin duda afecta a México, quien es el principal productor del continente.
Para México, perder esa gran fuente de ingresos podría generar un gran cambio en la estructura del negocio y además una gran presión para los legisladores.
“En México estamos persiguiendo una sustancia a toda costa, incluso a costa de la vida humana, que una vez cruzando la frontera va a ser perfectamente legal. Nos pone en una contradicción evidente pero el gobierno mexicano vive en la contradicción de forma natural”, dice Lisa Sánchez, directora del programa de política de drogas de México Unido contra la Delincuencia.
Al parecer de los expertos, la guerra que se ha vivido contra el narcotráfico desde el sexenio de Felipe Calderón solo ha generado violencia e innumerables muertes. Cuando hay algo evidente; el negocio del crimen organizado no solo es la marihuana, los delitos que se comenten también implican violencia, secuestros, trata de personas, entre muchos otros crímenes.
Una de las posibilidades que expertos como Jorge Castañeda, exsecretario de Relaciones Exteriores propone, es que el gobierno considerará hacer legal la marihuana en México y afirma que sería absurdo seguir sacrificando vidas por esta lucha.
“No podemos minimizar el impacto positivo ni tampoco exagerar los beneficios. La regulación de la marihuana no solucionaría el problema de la financiación del crimen, pero sí solucionaría las leyes de drogas”, dice Lisa Sánchez, de México Unido contra la Delincuencia.
Lisa Sánchez además explicó que México necesita más medidas de seguridad, que vayan más allá de perseguir el consumo de la marihuana y se concentren en darle justicia a la gente que tanto la necesita.
POB/FOL
