Origen es destino y, por lo mismo, no es de extrañarse que el todavía edil de San Pedro Cholula, José Juan Espinosa Torres, haya decidido regresar a sus inicios; al PRI y a hacer lo posible por que regresen los gobiernos priístas.
Espinosa Torres es el dueño de la franquicia de Movimiento Ciudadano en Puebla y, aunque el dirigente formal sea un tal Ángel Pérez, la realidad es que el alcalde cholulteca es el que mueve los hilos del partido propiedad del ex gobernador de Veracruz, Dante Delgado.
Y, como dueño de la franquicia de Movimiento Ciudadano en Puebla, el presidente de San Pedro Cholula, ha hecho lo posible por fortalecer al grupo político con el que alguna vez simpatizó: el marinismo, el PRI del “góber precioso”, Mario Marín Torres, como lo demuestra el hecho de que varios candidatos actuales de MC hayan sido defensores del ex mandatario, incluyendo a los ex diputados locales del PRD, Irma Ramos Galindo y Rodolfo Huerta Espinosa.
Ramos Galindo y Huerta Espinosa fueron legisladores locales del PRD e, incluso, la 1ra se desempeñó como presidenta estatal del partido. Pero ninguno de los dos se atrevió NUNCA a criticar al “góber precioso”, Mario Marín.
Si le va bien a Mario Marín, le va bien a Puebla: JJ Espinosa Torres
Incluso, en la glosa del 2do informe de labores del ex mandatario, el entonces diputado perredista Rodolfo Huerta, mientras a nivel nacional el escándalo por el ataque a Lydia Cacho causaba indignación y hartazgo, el legislador del PRD –solícito, sumiso – le pedía a Mario Marín Torres utilizar el asunto Lydia Cacho como “acicate para regresar a ver a los grupos olvidados y marginados; para trabajar con los votantes y para reencontrar la legitimidad perdida”.
Otro ex diputado local de “izquierda” que, se supone, debía haberse lanzado con todo contra el “góber precioso” por las violaciones a los derechos humanos de la luchadora social Lydia Cacho fue el propio José Juan Espinosa Torres, quien no solamente no defendió a la periodista, sino que se aventó la puntada de decir que “si le va bien a Mario Marín, le va bien a Puebla” en la glosa de su 2do informe. ¿Así o más servil?
Generoso, afable con quienes le servían, Mario Marín agradeció las atenciones del entonces diputado de Convergencia con un sí cuando le preguntaron si quería ser padrino de su boda con Nancy de la Sierra, la también legisladora priísta. El enlace fue en Metepec y, según la estupenda crónica de la periodista Selene Ríos, el “góber precioso” fue el invitado de honor, junto con Enrique Doger Guerrero, alcalde de Puebla en ese momento.
En este contexto, no es de extrañarse que el “góber precioso” haya ido el fin de semana pasado a “reforzar” la campaña de la esposa del alcalde cholulteca y candidata del PRI en Teziutlán a la diputación federal, Nancy de la Sierra. Al final de cuentas, origen es destino y tanto Espinosa Torres como su cónyuge son ahijados, al menos de boda, de Mario Marín.
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POB/GACC
